El Gobierno dice que la propuesta laboral no recorta derechos y está abierta

Madrid.- El Gobierno defendió hoy el documento de reforma laboral presentado a los agentes sociales en el Diálogo Social y consideró que "no recorta ningún derecho de los trabajadores", al tiempo que insistió en que es un documento abierto a la negociación.

Sin embargo, los sindicatos UGT y CCOO criticaron que la propuesta no sea acertada y que la ampliación del contrato de Fomento del Empleo (que supone una indemnización de 33 días por año trabajado) al colectivo de los hombres de entre 30 a 45 años suponga precarizar el mercado de trabajo.

No obstante, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, insistió hoy en que el compromiso del Ejecutivo sigue siendo no recortar ningún derecho laboral y confió en llegar a un acuerdo con los agentes sociales "en el menor tiempo posible", a finales de este mes o principios de mayo.

De la Vega dijo que la propuesta del Ejecutivo es una "herramienta más de trabajo" y explicó que los objetivos son reducir la dualidad de la contratación y la temporalidad, al tiempo que valoró fórmulas que están en el derecho europeo como son los modelos laborales "alemán" y "austríaco".

El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, dijo que "todas y cada una" de las propuestas que contiene el nuevo texto serán negociadas e insistió en que lo que resulte al final será fruto del diálogo social.

El ministro confía en llegar a un "gran acuerdo" y reiteró que el nuevo documento es "dar un paso" en la dirección del aprobado el 5 de febrero, el primero que se entregó a los agentes sociales.

También la vicepresidenta segunda y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, reiteró que el documento debe seguir su curso en la negociación con los agentes sociales aunque dijo que son "propuestas positivas que favorecen la contratación indefinida y la creación de empleo".

Desde las centrales sindicales, el secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, consideró que el modelo "austríaco" no puede trasladarse de manera "mecánica" al mercado laboral español y explicó que el fondo de indemnización creado para los trabajadores no lo paga el Estado sino el conjunto de las empresas, en una parte, y otra la empresa que despide al trabajador, si lo hace por razones objetivas.

Para Toxo, es suficiente con el actual contrato ordinario ya que en su opinión el de Fomento del Empleo nació con vocación temporal y lleva ya 13 años.

El secretario general de UGT, Cándido Méndez, subrayó que el nuevo borrador no es un documento definitivo y criticó el "modelo austríaco", que exigirá un esfuerzo en la negociación.

Méndez valoró que se plantee la reducción de la jornada laboral como mecanismo para reducir los despidos.

Desde la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA) el documento fue calificado de "valiente" porque clarifica las causas económicas del despido objetivo.

El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, dijo que la propuesta será analizada aunque él aboga por cambios que permitan que las condiciones para la "extinción laboral" en España se parezcan a las que existen en otros países europeos.

En el ámbito político, el presidente del PP, Mariano Rajoy, criticó que el "enésimo" documento del Gobierno "no sirva" para afrontar el paro y sea un conjunto de "sugerencias", "incompleto, insuficiente y vago".

ERC consideró "estimable" la propuesta, aunque expresó su preocupación por si el modelo austríaco pueda conllevar costes para las empresas, especialmente para las pymes, mientras que ICV advirtió de que con despidos más baratos se destruye igualmente empleo.

IU también criticó que el texto no sea concreto ni definido frente a CiU que valoró la idea de flexibilizar el despido.