El IBEX cae un 0,15 % pero mantiene los 10.100 a la espera del IPC de EEUU

Madrid, 22 oct.- El principal indicador de la bolsa española, el IBEX 35, aguardaba la publicación del IPC estadounidense de septiembre con un pequeño recorte del 0,15 % que le permitían conservar los 10.100 puntos, en línea con la apatía de la mayoría de bolsas europeas.

A las 12.00, el selectivo español perdía 14,90 puntos y se situaba en 10.137 unidades, mientras que el Índice General de la Bolsa de Madrid retrocedía un 0,11 %.

Entre las principales bolsas europeas, sólo el DAX de Fráncfort mantenía el tono positivo, en tanto que el resto de parqués sufría moderados descensos del 0,20 % en Londres, del 0,07 % en París, y del 0,01 % en Milán.

A la espera del IPC estadounidense de septiembre, referencia que eclipsará cualquier otro indicador, los futuros de los principales índices estadounidenses anticipaban suaves descensos en Wall Street.

Desde el departamento de análisis de Bankinter indican que si, como cabe esperar, el IPC de Estados Unidos continúa reduciéndose, el dato debería ser bien acogido por el mercado, ya que reduciría las presiones a la Reserva Federal (Fed) para que endurezca su política monetaria.

Varias voces ha alertado contra una retirada precipitada de las medidas de estímulo de la Fed, en un contexto, añade Bankinter, "en el que la recuperación económica global está perdiendo tracción".

A esta hora, Abengoa sufría el mayor descuento del IBEX, del 4,54 %, en tanto que GAM, en medio de un proceso de refinanciación, vivía la mayor caída de todo el mercado, del 6,67 %.

También se negociaban con pérdidas todos los grandes valores: Telefónica (0,75 %), Repsol (0,52 %), Santander (0,45 %), BBVA (0,13 %) e Inditex (0,05 %), y únicamente Iberdrola, que ha presentado hoy sus resultados hasta septiembre, se revalorizaba un 0,26 %.

Hasta las 12.00, el parqué español había negociado 1.058 millones de euros, de los que 134 correspondían al Santander, y 94 a una operación de bloques sobre Inditex.

En el mercado de divisas, el euro retrocedía hasta 1,269 dólares frente a la moneda estadounidense.