El Ibex cae un 1,74% tras un dato de empleo americano decepcionante

El gran dato de la semana, el paro americano, ha estado a punto de arruinar la semana a las bolsas mundiales. A pesar de la caída cercana al 2% del viernes, el Ibex ha terminado la semana con una revalorización de 1,44%.

Una subida que da continuidad a los fuertes avances de julio -del 13%- tras una semana marcada por la creciente confianza en la economía española por parte de los inversores extranjeros, como demuestra que la subasta de bonos celebrada el jueves se saldó con la colocación de 3.500 millones a euros a un precio un 30% más barato que en la anterior. El BCE, que ha lanzado un mensaje optimista sobre la recuperación en Europa, ha ayudado al proceso.

La semana, que empezó por todo lo alto, con subidas superiores al 3%, ha terminado con mal sabor de boca. El viernes, tras un comienzo tranquilo en el que el Ibex 35 ha llegado a soñar con cerrar por encima de los 10.900 puntos, el mal dato de empleo de Estados Unidos revolucionó a los inversores, que se han lanzado a recoger parte de las plusvalías acumuladas.

El Ibex 35 se dejó el viernes un 1,74% y empezará la segunda semana de agosto en hasta los 10.651 puntos. Por momentos, incluso llegó a perder el nivel de los 10.600, pero ahí ha aparecido dinero y la caída -que ha llegado a superar con creces el 2%- se ha reducido sensiblemente. Una demostración de que los inversores no tiran la toalla y siguen creyendo que el fondo del mercado es alcista.

El mercado ha acusado sobremanera el mal dato de empleo americano: los 131.000 empleos destruidos en julio en Estados Unidos doblan las previsiones de los analistas, lo que ha sido un mazazo para los inversores.

La semana había dejado ya pruebas evidentes de la irregularidad de la irregularidad de las grandes cifras económicas estadounidenses. A datos optimistas sobre la industria manufacturera les han seguido otros preocupantes sobre ventas pendientes de viviendas, por ejemplo, que cuestionan la buena salud de la primera economía del mundo.

Lo cierto es que tras hacerse pública la cifra más esperada de la semana, el mercado ha terminado de venirse abajo al conocer la rebaja del dato de junio: frente a los 125.000 empleos que, en teoría, se habían destruido durante el mes pasado, la realidad dice ahora que son 221.000. Pese a estas cifras, la tasa de paro se mantiene estable en el 9,5%.

El dato más esperado de la semana ha sembrado del rojo las pantallas de contratación. Telecinco, Abengoa y Santander se llevan la peor parte con descensos entre el 1% y el 2% y, además del banco cántabro, otros blue chips como BBVA y Telefónica sufren caídas superiores al 2% y al 1%, respectivamente. 

Sólo se salva de la quema Acerinox, con una subida del 0,48%. Otro de los valores que han resistido bien el aluvión vendedor es ACS, después del acuerdo con JP Morgan para vender Dragados SPL por 720 millones.

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