El IPC chino crece el 3,2 % en febrero, su mayor subida en diez meses

  • El índice de precios al consumo (IPC), el principal indicador de la inflación, creció el 3,2 % interanual en febrero con respecto al mismo mes del año pasado, su mayor subida en diez meses, según anunció hoy la Oficina Nacional de Estadísticas del país asiático.

Pekín, 9 mar.- El índice de precios al consumo (IPC), el principal indicador de la inflación, creció el 3,2 % interanual en febrero con respecto al mismo mes del año pasado, su mayor subida en diez meses, según anunció hoy la Oficina Nacional de Estadísticas del país asiático.

El buró adjudicó el repunte a la subida de los precios de los alimentos durante las vacaciones del Año Nuevo chino de enero, cuando crece sustancialmente la demanda.

El comunicado señala un aumento del 6 % del precio de los alimentos en febrero en contraste con el mismo mes de 2012, pero subraya que es "improbable que esta tendencia continúe", debido a que el efecto de las vacaciones es perecedero y a que la llegada del buen tiempo ayudará a mejorar los suministros.

El buró también informó de que el índice de precios de producción (IPP) cayó un 1,6 % en febrero (en comparación con el mismo periodo de 2012), la duodécima bajada consecutiva desde que en marzo del año pasado bajó por primera vez desde diciembre de 2009.

El mes pasado el IPP también registró una caída del 1,6 %.

En cuanto al IPC, su subida es la mayor desde que alcanzó el 3,4 % interanual en abril de 2012, y también es ligeramente superior al 3 % que pronosticaban los expertos.

No obstante, se mantiene por debajo del objetivo del 3,5 % fijado por China para 2013 y menor que el que estableció el año anterior, de un 4 %.

En 2012, el IPC chino creció un 2,6 %.

"China todavía se encuentra bajo una considerable presión inflacionaria este año", aseguró el primer ministro saliente, Wen Jiabao, en su discurso de despedida el martes pasado, en el marco de la Asamblea Nacional Popular (ANP) que China celebra hasta el próximo día 17.

Entonces, Wen marcó un objetivo de crecimiento económico del 7,5 %, el mismo que el pasado año, cuando registró finalmente un 7,8 %.

Algunos analistas achacan el aumento de la inflación a la débil política monetaria que China ha llevado a cabo para impulsar el crecimiento y el consumo durante la época de las vacaciones del Año Nuevo, y alertan de que, si continúa en esa senda, sobrepasará el objetivo del 3,5 % fijado por el Gobierno.

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