Bilbao, 19 abr.- El Tribunal Supremo ha rechazado los recursos interpuestos por distintas instancias de La Rioja y Castilla y León contra la decisión de la Diputación Foral de Vizcaya de 2004 de instaurar un Impuesto de Sociedades más bajo que el del resto del Estado.
Así lo ha comunicado hoy en una nota la institución foral vizcaína, que se ha congratulado por que el alto tribunal haya sancionado definitivamente el derecho de Vizcaya a establecer un gravamen de Sociedades diferente al del conjunto del Estado, en virtud del Concierto Económico vasco.
El origen del pleito judicial se remonta a 2004, año en el que las Juntas Generales de Vizcaya aprobaron situar el Impuesto de Sociedades en este territorio en el 32,5 %, frente al 35 % que regía para el resto de España.
El Supremo, según la Diputación vizcaína, ha rechazado tres de los ocho recursos interpuestos por diferentes estamentos políticos y económicos de La Rioja y Castilla y León contra las sentencias del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, que confirmaron, el 22 de diciembre de 2008, la conformidad a Derecho de las normas forales del Impuesto sobre Sociedades y consagraron la adecuación y respeto del Concierto Económico a las normas del Derecho de la Unión Europea.
En los tres primeros autos comunicados a la Diputación vizcaína -ha precisado en su nota-, el Supremo ha desestimado íntegramente las pretensiones de las comunidades autónomas de La Rioja y de Castilla y León y por el sindicato UGT de La Rioja de suspender dicho impuesto y ha condenando a pagar las costas del largo pleito judicial a las instituciones recurrentes.
La Diputación vizcaína ha manifestado su "alegría" por este fallo, porque el Tribunal Supremo pone, con él, "punto y final" a la "polémica artificial" generada "por intereses particulares de determinadas instituciones o de sus dirigentes" de ambas comunidades limítrofes con Euskadi.
La institución foral ha señalado que estas resoluciones definitivas del Supremo también dan la "necesaria y esperada seguridad jurídica y estabilidad al sistema tributario" de Bizkaia.
El Gobierno vizcaíno ha lamentado que "el empecinamiento político interesado de algunos haya intentado convertir a las empresas y a los contribuyentes de los Territorios Históricos en ciudadanos de segunda, con una normativa tributaria sometida a una situación de continuo acoso y en permanente cuestionamiento judicial".
"Finalmente vemos con satisfacción -ha agregado- que tanto el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, como el Superior de Justicia del País Vasco y el Supremo han acabado por colocar a cada uno en su lugar".
La Diputación vizcaína espera que, en los próximos días, se reciban las sentencias correspondientes a los otros cinco recursos planteados sobre el mismo asunto, que "en buena lógica -ha vaticinado- tendrán el mismo contenido confirmatorio de la validez de nuestra regulación del Impuesto sobre Sociedades".
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