Ex-ministro colombiano Ocampo: "los ajustes no son una herramienta mágica"

  • El ex-ministro colombiano de Hacienda y profesor de la Universidad de Columbia, José Antonio Ocampo, ha dicho hoy que las políticas de ajuste no son una herramienta "mágica", sino que se necesitan medidas productivas y tecnológicas profundas.

Madrid, 15 jul.- El ex-ministro colombiano de Hacienda y profesor de la Universidad de Columbia, José Antonio Ocampo, ha dicho hoy que las políticas de ajuste no son una herramienta "mágica", sino que se necesitan medidas productivas y tecnológicas profundas.

Ocampo, que ha participado en "Las experiencias y enseñanzas de las crisis económicas en Europa y América Latina", uno de los cursos de verano de la Universidad Complutense, ha asegurado también que España volverá a crecer, pero no al ritmo previo a la crisis porque "no es viable".

En su opinión, desde el Banco Central Europeo (BCE) no ha habido ninguna política para mejorar la financiación privada de los países periféricos, algo más importante que la propia consolidación fiscal.

"La compra de títulos hipotecarios por el BCE conseguiría reactivar el mercado de crédito privado en los países del sur de Europa", ha añadido.

En el curso también ha intervenido el profesor de la Universidad Complutense José Antonio Alonso, quien ha reconocido que los economistas han pecado de "soberbia" al creer que son capaces de prever las crisis.

Asimismo, ha dicho que lo importante en Europa es evitar el contagio, para lo que hay que actuar con suficiente agilidad y evitando medidas graduales, aunque, a su juicio, esto es difícil porque Europa casi siempre responde tarde.

En otra ponencia, el economista y profesor de la Universidad Pontificia de Comillas (ICADE), José Carlos Díez, ha explicado que esta recesión se asemeja mucho a la crisis latinoamericana iniciada en 1982, y ha asegurado que Europa llevaba 70 años sin experimentar una situación de tal magnitud.

Para Díez, la Comisión Europea es "un cementerio de elefantes" donde van los políticos "fracasados", algo preocupante porque, en su opinión, Europa no está en manos de profesionales.

"No hay que escuchar ni al Fondo Monetario Internacional (FMI) ni a la troika, porque no dan ni una", ha concluido.

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