En medio del convulso momento que vive el sector inmobiliario, el rascacielos más emblemático de Madrid podría empezar a moverse en el mercado. Torre Picasso, propiedad del grupo constructor FCC, podría ponerse por primera vez en venta después de que el consejero delegado del grupo, Baldomero Falcones, haya dejado abierta esa posibilidad.
"No pongo ni quito carteles a nada", ha sido su única respuesta cuando se le preguntaba sobre si la compañía estaría dispuesta a desprenderse de este edificio. No obstante, cualquier movimiento en esta línea necesitaría el visto bueno de Esther Koplowitz, primera accionista de FCC, que siempre se ha mostrado contraria a desprenderse de una de las joyas de su corona.
Esta noticia ha saltado durante la rueda de prensa previa a la junta general de la compañía que se celebra esta tarde en Barcelona.
FCC sí que tiene abierta oficialmente la venta de dos de sus sedes de oficinas, ya que en Torre PIcasso el grupo sólo tuiene una planta de carácter fundamentalmente representativo.
Las principales operaciones que se están haciendo en el mercado en torno a este tipo de inmuebles son bajo la fórmula de sale&leaseback, por la cual quien compra el edificio lo hace garantizándose durante un periodo de años determinado el alquiler de los inquilinos.
Desde este punto de vista, Torre Picasso probablemente es uno de los activos más apetecibles de la capital madrileña, puesto que, además de ser un rascacielos singular y estar situado en pleno centro financiero, tiene ocupadas todas sus oficinas en estros momentos.
Por otra parte, Falcones ha respaldado el intrerés que sugería la inmobiliaria Realia por comprar Torre Kio de Caja Madrid. Esta operación, que adelantó lainformacion.com el lunes podría rondar los 180 millones de euros, un cheque que la compañía presidida por Ignacio Bayón tiene previsto invertir este añio.
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