Fillon le garantiza a Rousseff que Francia "nunca" renunciará al euro

Brasilia, 15 dic.- El primer ministro francés, François Fillon, le garantizó hoy a la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, que Francia "nunca va a transigir" en relación al euro, que calificó de "símbolo de la construcción y la civilización europea".

Fillon fue recibido por Rousseff en Brasilia y en una declaración conjunta le transmitió un mensaje de esperanza en la economía europea, pese a la "crisis de deuda soberana que atraviesan algunos países de la zona del euro, atacados por los mercados cuando su situación objetiva es mejor que la de otros países del mundo".

A pesar de las preocupaciones que inquietan a los mercados y a los países emergentes por el posible impacto de la crisis global, aseguró también que "Francia está plenamente determinada a controlar las finanzas públicas y a colaborar para relanzar el crecimiento europeo".

A su turno, Rousseff reafirmó "la disposición de Brasil para realizar, si es necesario, nuevos aportes financieros al Fondo Monetario Internacional (FMI), siempre y cuando haya garantías de que la reforma del organismo será implementada".

La presidenta brasileña sostuvo que la "sociedad estratégica" que su país firmó con Francia en septiembre de 2009 ha cobrado "una mayor importancia en momentos en que el mundo pasa por una de sus mas grandes crisis".

Destacó en particular que el comercio bilateral ha mantenido un "razonable crecimiento" en los últimos años, hasta cifrar 8.400 millones de dólares en 2010, y también el hecho de que Francia es actualmente el quinto mayor inversor extranjero en Brasil, donde operan unas 500 empresas galas.

Agregó que el "área de defensa es uno de los pilares de la sociedad estratégica" con Francia, país en el que Brasil desea apoyarse para "construir una verdadera industria nacional de defensa".

En sus discursos, ni Fillon ni Rousseff hicieron ninguna alusión directa a una licitación convocada por Brasil para la compra de 36 cazabombarderos, en la que los aviones Rafale, de la empresa gala Dassault, compiten con los Súper Hornet F/A-18, de la estadounidense Boeing, y los Gripen NG, de la sueca Saab

Sin embargo, el primer ministro galo dijo que su país conoce "las necesidades de un refuerzo de la capacidad aérea" de Brasil y sus prioridades en materia de seguridad fronteriza.

"Saben que pueden contar con propuestas francesas en todas estas áreas", afirmó Fillon, quien además garantizó la transferencia de tecnología que exigen las autoridades brasileñas para la operación con los cazabombarderos.

Según dijeron a Efe fuentes oficiales brasileñas, el asunto fue tratado en una reunión privada entre Rousseff y Fillon, quien volvió a abogar por los Rafale, aviones que Francia todavía no ha logrado vender a ningún otro país.

Rousseff, sin embargo, le ratificó que la operación se mantiene suspendida en virtud de recortes presupuestarios que su Gobierno ha debido aplicar para defenderse de la crisis global.

El último fracaso comercial de estos aparatos fue este mismo año, cuando Emiratos Árabes Unidos (EAU) declinó adquirirlos debido a que la oferta de Dassault no era competitiva, lo cual llevó al ministro de Defensa francés, Gérard Longuet, a declarar que los Rafale pueden dejar de fabricarse si esa situación persiste.

En el marco del encuentro entre Rousseff y Fillon, se firmaron cinco acuerdos en las áreas de comercio e inversiones, previsión social y educación, último apartado en el que Francia se comprometió a recibir en sus universidades a 10.000 estudiantes que serán becados por el Gobierno brasileño.

El primer ministro francés comenzó su visita a Brasil hoy mismo, en la ciudad de Sao Paulo, donde se reunió con autoridades locales y dictó una conferencia sobre la situación económica mundial en la Federación de Industrias del Estado de Sao Paulo (Fiesp).

Tras la reunión con Rousseff, Fillon viajó hacia Río de Janeiro, donde mañana rendirá homenaje a las 228 víctimas de un avión de Air France que cayó al mar en junio de 2009 tras despegar de esa ciudad con rumbo a París, visitará una favela y se reunirá con autoridades locales.