Fráncfort (Alemania), 5 mar.- El consejo de gobierno del Banco Central Europeo (BCE) se reúne mañana para tratar la política monetaria de la zona del euro sin que haya consenso esta vez sobre si bajará o no de nuevo los tipos de interés.
Algunos expertos contemplan esta posibilidad pero otros ya no lo ven tan seguro después de conocerse las últimas cifras de inflación y actividad industrial de la zona del euro.
Las tensiones en Ucrania han complicado más la situación por los efectos que podrían tener sobre la economía de la zona del euro, si bien la situación en los mercados se ha relajado desde que el martes el presidente de Rusia, Vladimir Putin, moderara su discurso.
El BCE dará a conocer mañana las nuevas proyecciones macroeconómicas de inflación y crecimiento.
En caso de que se produzca una revisión a la baja en las cifras de inflación, la entidad se decantará por recortar su tasa de interés rectora, dijo a Efe el analista de Commerzbank Michael Schubert.
La tasa de interés rectora del BCE se sitúa en el mínimo histórico del 0,25 %.
El BCE previó en diciembre una inflación del 1,1 % para 2014 y del 1,3 % para 2015, cifras que se alejan del objetivo del BCE, que es lograr una tasa de inflación cercana pero siempre por debajo del 2 % a medio plazo.
Además, las proyecciones macroeconómicas de marzo contendrán los primeros pronósticos para 2016.
El presidente del BCE, Mario Draghi, dijo a comienzos de febrero que el consejo de gobierno prefería tener más datos económicos y las nuevas proyecciones económicas antes de actuar.
La actividad manufacturera del conjunto de zona del euro fue más sólida de lo que se preveía en febrero, aunque se ralentizó respecto al mes anterior.
El índice de gestores de compra del sector manufacturero cayó en la zona del euro en febrero a 53,2 puntos desde 54,0 puntos en enero.
La inflación interanual de la zona del euro se mantuvo en el 0,8 % en febrero, como en enero, frente a la desaceleración que preveían los expertos.
Esta tasa de inflación está influida por las cifras de Francia, que tuvo efectos estacionales, y bajará de nuevo en marzo, según Commerzbank.
El BCE podría anunciar mañana el fin de la esterilización de la liquidez del programa de compra de deuda soberana en el mercado secundario, que acometió entre mayo de 2010 y comienzos de 2012.
El BCE ofrece a los bancos la posibilidad de devolver semanalmente determinadas cantidades de la liquidez que tienen por la compra de los bonos que hizo la entidad monetaria a cambio de intereses.
Actualmente hay una liquidez bruta de unos 175.000 millones de euros procedente de este programa, que en caso de no ser esterilizada se quedaría en el mercado y contribuiría a reducir la volatilidad, añadió Schubert.
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