Junta pide a Nissan evitar "ajustes traumáticos" y el comité mantiene huelga

  • La Junta de Castilla y León ha pedido hoy a Nissan que evite "ajustes traumáticos" en su planta de Ávila ante el "excedente" de al menos 50 trabajadores del que habla la multinacional japonesa de vehículos industriales, mientras el comité de empresa mantiene la convocatoria de huelga para el 14 de enero.

Ávila, 29 dic.- La Junta de Castilla y León ha pedido hoy a Nissan que evite "ajustes traumáticos" en su planta de Ávila ante el "excedente" de al menos 50 trabajadores del que habla la multinacional japonesa de vehículos industriales, mientras el comité de empresa mantiene la convocatoria de huelga para el 14 de enero.

Ambas partes han hecho públicas sus posturas tras la reunión de trabajo mantenida en Valladolid por el consejero de Economía y Empleo, Tomás Villanueva, con representantes del comité, en presencia de la secretaria general del Ministerio de Industria, Energía y Turismo, Begoña Cristeto.

Tras el encuentro, en el que también ha estado el director general de Industria de la Junta, Carlos Martín Tobalina, la Administración autonómica ha instado a la plantilla en nota de prensa a "seguir trabajando en el proceso abierto de negociación" con el empresa para "asegurar el futuro industrial" de la planta.

En este sentido, ha considerado "imprescindible" que se produzca un "acercamiento de posturas" por ambas partes para llegar a "puntos de encuentro que permitan visualizar" la continuidad de la factoría "asegurando una mayor capacidad de producción y nuevas inversiones que posibiliten nuevos proyectos industriales".

Tanto el Gobierno regional como el Ministerio han coincidido en pedir a la empresa un "compromiso real" con el plan industrial de 2010 que está aún en proceso de ejecución y "más carga de trabajo", así como "evitar ajustes traumáticos".

En este sentido, ambas administraciones sostienen que en el caso de ser necesaria una reducción de plantilla se acuda a la "negociación pactada" para acometer lo que denominan "ajustes mínimos", han precisado fuentes del Gobierno autonómico en el comunicado.

Durante la presentación del nuevo plan industrial el pasado 18 de enero, el fabricante japonés condicionó su aplicación y la llegada de nuevas inversiones en Ávila al despido de 50 personas, mientras que el futuro de otras 80 de logística y limpieza estaría supeditado a una rebaja de la masa salarial de la totalidad de la plantilla.

Ante esta situación, Junta y Ministerio han solicitado a ambas partes "un nuevo ejercicio de responsabilidad" con el objetivo de "evitar posturas rupturistas", que en su opinión "en nada beneficiarían al futuro de la fábrica".

Por su parte, el presidente del comité de empresa, Iván Zazo, ha agradecido la "premura" con la que ambas administraciones han contestado a su solicitud de entrevista, a la vez que ha mostrado su intención de no levantarse de la mesa de negociación, ya que los trabajadores están dispuestos al "diálogo".

Sin embargo, Zazo ha confirmado que desde el comité se mantiene "inamovible" la convocatoria de huelga en la fábrica de Ávila para el próximo 14 de enero si Nissan "no recapacita antes" en sus planteamientos.

Al respecto, y tras señalar que más allá de inversiones que desde su punto de vista no generarían empleo, las tres condiciones que plantean se basan en medidas "generadoras de empleo", una "garantía" para los 491 trabajadores de la plantilla y la ausencia de "despidos traumáticos".

En este contexto, Zazo ha expresado la voluntad del comité de sentarse "lo antes posible" a negociar, manteniendo su línea de "responsabilidad".

Hace dos semanas, el consejero director general y vicepresidente de las Operaciones Industriales de Nissan en España, Frank Torres, presentó un plan industrial con el objetivo de poder optar a la adjudicación de la versión Euro6 del modelo NT400, lo que supondría una inversión de 29 millones de euros en la factoría abulense.

Antes, la multinacional japonesa contempla mantener en los próximos tres años unos volúmenes de producción estables que se sitúan en 13.000 unidades, lo que obligaría a realizar un ejercicio de "redimensionamiento" que pasa por "reducir la plantilla en 50 personas".

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