La Generalitat quiere que el comprador del Banco de Valencia mantenga la red

Valencia, 25 abr.- El conseller de Economía, Industria y Comercio de la Generalitat Valenciana, Máximo Buch, ha afirmado hoy que la entidad compradora del Banco de Valencia debería mantener la red de oficinas y la proximidad del banco valenciano, porque este funciona de forma "muy cercana" al ciudadano y a la empresa.

Buch ha hecho estas manifestaciones al ser preguntado por el candidato ideal para quedarse con el Banco de Valencia, intervenido por el Banco de España, durante un foro económico organizado por el diario Las Provincias y Pricewaterhouse Coopers.

El conseller ha defendido que el banco comprador debe complementar su red con la del Banco de Valencia y fortalecer su estructura de esta manera, además de mantener la marca y la red.

Según ha asegurado, "la gran fortaleza" del Banco de Valencia, como dicen representantes del Banco de España y del FROB, es ser "un gran banco minorista, que funciona muy cercano al ciudadano y a la empresa, y eso hay que mantenerlo".

Mantener "un centro de decisión relevante en Valencia, Castellón y Alicante" permite un acceso "ágil y rápido" a quienes toman las decisiones, ha reiterado.

Sobre la permanencia de José Luis Olivas como presidente de Bancaja tras la gestión realizada en el Banco de Valencia y su relevo, el conseller ha indicado que la Generalitat "no releva a nadie, no puede ni debe intervenir ni tiene influencia" en esa decisión.

Son los consejeros de Bancaja, elegidos por la Generalitat -"de forma minoritaria", ha dicho-, corporaciones públicas de "distinto signo político", impositores y empleados, quienes eligen al presidente de la entidad, que es "un ente autónomo".

"Eso sería como decir por qué no ceso al presidente del Banco Central Europeo. Yo pondría a uno más amigo de España, pero no es mi atribución", ha argumentado.

Sobre la Sociedad de Garantía Recíproca (SGR) de la Comunidad Valenciana, en causa de disolución, Buch ha explicado que la recomendación del Banco de España de que el consejo de la institución se reduzca de 38 a 15 miembros es "muy sensata" porque permitirá ser "más eficientes".

Ahora la SGR, ha dicho, tiene "un trabajo ingente" que no acaba haciendo una ampliación de capital y aportando liquidez, sino que continúa con el saneamiento y el diseño de procesos eficientes que posibiliten el acceso al crédito de las pymes, que es "el objetivo final" de la entidad.