La oposición lusa pide explicaciones por la nueva dimisión gubernamental

  • El principal partido de la oposición en Portugal, el Socialista (PS), exigió hoy explicaciones al primer ministro, Pedro Passos Coelho, por la nueva dimisión en su Gabinete, la del Secretario del Tesoro, mientras que la izquierda marxista reiteró que el Ejecutivo conservador debe de cesar funciones.

Lisboa, 7 ago.- El principal partido de la oposición en Portugal, el Socialista (PS), exigió hoy explicaciones al primer ministro, Pedro Passos Coelho, por la nueva dimisión en su Gabinete, la del Secretario del Tesoro, mientras que la izquierda marxista reiteró que el Ejecutivo conservador debe de cesar funciones.

La oposición de izquierdas reaccionó así a la renuncia de Joaquim Pais Jorge, que presentó hoy su dimisión apenas un mes después de asumir el cargo después de ser acusado de participar en la venta de productos financieros de riesgo al anterior Gobierno luso, de signo socialista.

La dimisión de Pais Jorge, la quinta anunciada en los últimos tres meses en la Administración de Pedro Passos Coelho, se produce semana y media después de la profunda remodelación gubernamental forzada por las tensiones entre los dos partidos que apoyan el Ejecutivo y que provocó una aguda crisis política en julio.

El PS dijo que la salida de Pais Jorge "tardía, pero inevitable" y exigió a Passos Coelho, de vacaciones en el Algarve (sur del país, explicaciones sobre la credibilidad del Ministerio de Finanzas para no seguir perjudicando la "imagen de Portugal en el extranjero" cuando resta un año para que acabe el programa de auxilio financiero al país.

El hasta ahora secretario de Estado del Tesoro cesó presionado por la opinión pública debido a su labor como uno de los responsables de la firma Citigroup en Portugal la pasada década, cuando supuestamente ofreció al Ejecutivo de entonces derivados de cobertura de riesgo crediticio (conocidos como 'swap').

Operaciones financieras de este tipo suscritas desde el año 2003 por diferentes empresas públicas, especialmente las de transportes, fueron destapadas por el actual Gobierno, que tasó las pérdidas potenciales en más de 3.000 millones de euros y que le llevó a renegociar esos contratos con varios bancos internacionales.

El Partido Comunista de Portugal (PCP) y el Bloque de Izquierda (BE, por su siglas en portugués), dos combativos y minoritarios partidos, aprovecharon la dimisión de Pais Jorge para ahondar en la necesidad de formar un nuevo Gobierno, que cumple las duras condiciones impuestas por el rescate financiero al país.

El dirigente comunista, Jorge Cordeiro, adujo que no es suficiente la dimisión de uno u otro miembro del Gabinete de Passos Coelho, pues "todo el Gobierno carece de condiciones para gobernar".

En un comunicado oficial, Pais Jorge, de 49 años, lamentó el "tratamiento mediático" y la cacería política de las que fue objeto en las últimas semanas y aseguró que su decisión se prende apenas por "la controversia creada" y no por su recorrido profesional.

El dimisionario secretario de Estado acusó además a la prensa lusa de haber falseado unos documentos para relacionarle con un intento de vender hace ocho años al entonces Ejecutivo socialista de José Sócrates estos derivados tóxicos.

Según un documento divulgado por los medios lusos, Pais Jorge participó en varios encuentros con Sócrates, que acabó por desechar la contratación de estos instrumentos financieros que corregirían el déficit de empresas pública de forma artificial.

A pesar de reconocer que esas reuniones entre Citigroup y el anterior Gobierno existieron, el actual Ejecutivo facilitó a los periodistas una copia de la propuesta original, que no coincide exactamente con la versión divulgada por los medios y donde no aparece, de hecho, el nombre del secretario de Estado dimisionario.

Pais Jorge había tomado posesión de su cargo el pasado dos de julio en sustitución de Maria Luís Albuquerque, quien fue ascendida a ministra de Finanzas por la dimisión de Vítor Gaspar.

La controversia por el caso de los 'swaps' también salpicó a la propia Albuquerque, quien tuvo que explicar en una larga comisión parlamentaria el pasado julio el papel que jugó en la suscripción de estos derivados durante su etapa como directora financiera de la empresa pública ferroviaria Refer.

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