La subida fiscal del Gobierno luso es un ataque a clase media para oposición

Lisboa, 12 oct.- El Gobierno portugués volvió hoy a defender su plan presupuestario para el 2013, que incluye una significativa subida de impuestos, mientras que la oposición rechazó sus planes por considerarlos un "ataque" a las clases medias.

Durante el debate quincenal celebrado hoy en el Parlamento luso, el primer ministro, Pedro Passos Coelho, incidió en que la adopción de nuevos ajustes es imprescindible para mejorar los ingresos públicos y reducir así el déficit en 2013 hasta el 4,5 %, meta acordada con la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI).

"El país necesita corregir ese desvío sin pedir más dinero y sin solicitar un segundo rescate", subrayó el líder conservador, quien recordó a los socialistas que fue durante su período en el Gobierno (2005-2011) cuando la deuda de Portugal se disparó.

Passos Coelho no detalló su proyecto presupuestario, que será entregado el lunes al Parlamento y cuyo contenido fue desvelado ayer por la prensa lusa, pero insistió en que las medidas de austeridad son necesarias por las "irresponsabilidades" del pasado.

La propuesta incluye cortes en el subsidio a parados y en las bajas por enfermedad; un significativo aumento de las tasas sobre la renta; la supresión de un sueldo mensual a los pensionistas que ganen más de 1.350 euros mensuales; y más impuestos sobre el tabaco o los coches de alta cilindrada, entre otros.

Sin embargo, el plan presupuestario suscitó hoy el rechazo frontal por la oposición, que consideró que este incremento de las tasas -que se suma a los ya aprobados en los dos últimos años- tendrá un efecto devastador, similar al de una "bomba atómica".

Así lo expresó hoy el secretario general del Partido Socialista (PS), António José Seguro, líder del principal grupo de la oposición, durante su intervención en el Parlamento.

Seguro incidió en que el proyecto presupuestario del Gobierno es un reflejo más del fracaso de sus políticas de austeridad y reclamó por ello un cambio de rumbo.

El líder socialista señaló que los ajustes deberían llevarse a cabo al mismo tiempo que se ponen en marcha medidas para fomentar el crecimiento, en la línea que defiende ahora el FMI.

Desde el Partido Comunista Portugués (PCP), su secretario general, el veterano Jerónimo de Sousa, consideró un "robo" y "saqueo" el incremento de la presión fiscal que pretende aprobar para 2013 el Gobierno conservador luso.

En esta misma línea, el coordinador del marxista Bloque de Izquierda (BI), Francisco Louça, acusó al Ejecutivo de declararle la "guerra a los ciudadanos".

En declaraciones a los periodistas, el líder del sindicato mayoritario CGTP, Arménio Carlos, instó a los portugueses a acabar definitivamente con un Gobierno que se encuentra "en el alambre", mientras que el secretario general de UGT, Joao Proença, alertó de que la subida de tasas afectará "sobre todo a las rentas más bajas".

Pese a las críticas, la aprobación de los Presupuestos para 2013 en el Parlamento luso se da por garantizada, ya que el Gobierno tiene mayoría absoluta gracias a la alianza entre los conservadores socialdemócratas (PSD) y democristianos (CDS-PP).