Lafarge y Holcim venden a CRH un paquete de activos para poder fusionarse

París, 2 feb.- El grupo francés Lafarge y el suizo Holcim anunciaron hoy un acuerdo para llevar a cabo negociaciones exclusivas con el irlandés CRH para venderle, por 6.500 millones de euros, una serie de activos que se habían comprometido a ceder para poder formalizar su fusión.

En un comunicado conjunto, Lafarge y Holcim señalaron que los activos de los que van a desprenderse, concentrados esencialmente en Europa, Canadá, Brasil y Filipinas, representaron una facturación de 5.200 millones de euros el pasado año y un resultado bruto operativo (Ebitda) estimado en 744 millones.

"Con este proyecto de transacción cuyo valor refleja la calidad de los activos, damos un gran paso para la creación de Larfarge-Holcim", subrayaron los presidentes respectivos, Bruno Lafont y Wolfgang Reitzle.

Los dos directivos precisaron que tras este anuncio están "más que nunca en buen camino para finalizar la fusión en el primer semestre de 2015".

La Comisión Europea había dado su visto bueno a esta unión en abril del pasado año, después de que los dos socios hubieran presentado una lista de cesiones por la que se interesaron diferentes candidatos, entre ellos industriales y consorcios de fondos de inversión.

En esa lista figuran todos los activos de Holcim en Francia, salvo una cementera en Altkirch, plantas de hormigón y granulados en Alsacia, una estación de triturado de Lafarge en Saint Nazaire, así como los activos de Lafarge en la isla de la Reunión, salvo su participación en Ciments de Bourbon.

Se añaden los bienes de Lafarge en Alemania, Rumanía, los de Lafarge Tarmac en el Reino Unido (salvo la cementera de Cauldon y otros negocios asociados) y los de Lafarge Republic en Filipinas, así como otros activos específicos.

También se venden los negocios de Holcim en Hungría, Serbia, Eslovaquia, Canadá, así como -en Estados Unidos- la cementera Trident que esa compañía tiene en Montana y algunas terminales en la región de los Grandes Lagos.

Por último, en Brasil se desprenden de negocios de ambas empresas que incluyen tres cementeras integradas y dos estaciones de triturado (con una capacidad de 3,6 millones de toneladas anuales) así como centrales de hormigón en el sureste.