Las gestoras de fondos dejan fuera de juego a la bolsa española

A la bolsa española aún le queda trabajo por delante si quiere recuperar la confianza de los inversores. A pesar de la subida del 7,3% que se ha marcado en las últimas dos sesiones, algunas gestoras de fondos como March Gestión, Banco Sabadell, Carmignac o BNY Mellon, han decidido alejarse de la renta variable nacional, mientras incrementan sus posiciones en las grandes bolsas internacionales.

Y no son las únicas que desconfían del mercado español. Hace apenas una semana, Bankinter y Renta 4 declararon abiertamente haber tirado la toalla con la bolsa española a corto plazo.

Pero no todos los mercados son igual de atractivos a los ojos de los expertos, que sitúan a la cabeza del ránking a la bolsa estadounidense, a la alemana y a las de los mercados emergentes, que son los que mejor han sobrevivido a la crisis económica y bursátil.

De hecho, según aseguran las firmas españolas, estas tres apuestas concentran cerca de un 60% de las carteras de riesgo medio (frente al 40% que representaban a principios de año), mientras que pesan cerca de un 80% dentro de las carteras de riesgo más elevado (mientras que hace unos meses la cifra no pasaba del 60%).

En este sentido, Carlos Andrés, director de inversiones de March Gestión, explica que, aunque parezca raro, a lo largo de este año la gestora ha incrementado el peso en la renta variable, pero no en la española.

En concreto, la gestora de Banca March ha centrado sus esfuerzos en la bolsa estadounidense, en la alemana y en las de los mercados emergentes, con Brasil a la cabeza. Las mismas apuestas que ya avanzó el banco estadounidense Citibank a principios del verano.

Según Andrés, en Estados Unidos han apostado "por el sector tecnológico (como Microsoft) y por algunas compañías mineras e industriales". En Alemania, continúa, "nos hemos centrado en las empresas exportadoras (como BMW) y en otras que tienen exposición al mercado alemán, que se está recuperando rápido.

Así, la entidad hace un guiño al índice germano Dax y al estadounidense Nasdaq (dedicado a la tecnología), que son los que más están subiendo este año.

Desde Banco Sabadell comentan que ahora están más expuestos a la renta variable, aunque no a la española. "En Estados Unidos la exposición supera el 50%, mientras que en Europa nuestros dos grandes objetivos son Alemania y Francia. En los mercados emergentes, en cambio, nuestra posición es más conservadora, aunque las referencias son China, Singapur y Japón". 

La entidad catalana, sin embargo, asegura no ver atractivo en Latinoamérica, porque considera que la renta variable de la región ya está cara.

Las gestoras extranjeras se quedan con los mercados emergentes

 La gestora francesa Carmignac, la que ha cosechado más éxitos durante la crisis, declara que los mercados emergentes representan "casi un 40%" de sus activos mundiales en renta variable. Las principales posiciones están en China, India y Brasil, con ponderaciones del 16%, 10% y 5%, respectivamente".

En concreto, la firma gala se decanta por el sector bancario de los países emergentes, a la que considera  una buena apuesta. "Hay que posicionarse en él  porque se va a beneficiar del aumento del consumo y de la necesidad que van a tener sus ciudadanos de pedir créditos", explica Charles Zerah, gestor del fondo Carmignac Global Bond.

Algo parecido opina BNY Mellon, que ve muchas posibilidades en los mercados emergentes. De hecho, la entidad señala que la inversión en estas regiones es una de las tendencias que van a marcar el paso de las gestoras de fondos en los próximos meses.

En este sentido, Sasha Evers, director general de BNY Mellon Asset Management para España y Portugal, apunta que "a pesar de que la recuperación económica es irregular, lo que parece estar claro es que los mercados emergentes van a crecer más y más rápido que los desarrollados. Por eso, en estas economías, tanto la renta variable como la renta fija se perfilan como buenas estrategias de inversión".

Con todo, las gestoras de fondos insisten en que hay valores dentro de la bolsa española que son muy buenas oportunidades para los inversores. Es más, confían en que su atractivo pronto se propague por todo el mercado nacional. Y, cuando llegue ese momento, incrementarán su exposición, como ya lo han hecho en las grandes bolsas internacionales.