Madrid.- El secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido, se ha mostrado hoy partidario de reformar en un futuro el Tratado de Lisboa para recoger en él todos los cambios introducidos por los Veintisiete en materia de política económica común.
López Garrido ha defendido esta medida durante su comparecencia en el Congreso ante la Comisión Mixta para la UE para hacer un repaso de las principales políticas comunitarias.
Para el secretario de Estado, "lo ideal" sería la reforma del Tratado de Lisboa, que entró en vigor en diciembre de 2009, aunque esta modificación tuviera su foco en los países que comparten el euro.
"Estoy seguro de que se hará la reforma del Tratado. Seguramente, en un momento futuro, sería bueno", ha remarcado.
La idea de modificar el tratado marco de la UE para incluir nuevos mecanismos de coordinación de las políticas económicas y presupuestarias la propuso el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, a comienzos de este mes.
La canciller alemana, Angela Merkel, apoyó esta acción, aunque la Comisión Europea ha sostenido que los actuales tratados ya permiten fortalecer la gobernanza y la coordinación económicas.
López Garrido ha defendido del mismo modo la reforma constitucional pactada entre PSOE y PP para controlar la deuda y favorecer la estabilidad presupuestaria y ha animado a todos los países a hacer lo mismo.
El PP ha apoyado la reforma del Tratado de la UE y la inclusión de un sistema de sanciones para los países que incumplan los objetivos fijados, según ha explicado su senador Alejandro Muñoz-Alonso.
López Garrido ha subrayado que Grecia no va a entrar en quiebra porque "se va a hacer todo lo que sea necesario" por parte de los socios europeos para evitar este colapso.
"Ningún país va a quedar desguarnecido. Grecia va a cumplir con sus compromisos. Compartimos esa confianza", ha afirmado.
A su juicio, los comentarios sobre la salida de Grecia del euro "son solo rumores, y el rumor no es noticia".
En declaraciones a los periodistas antes de la comparecencia, López Garrido había rechazado la impresión del expresidente del Gobierno Felipe González de que la UE esté "al borde del abismo" debido a la situación de Grecia.
"No creo que Europa esté al borde del abismo. No me parece que sea este el momento de anticipar posibles desastres, fracasos o precipicios", ha asegurado el secretario de Estado.
Sobre las próximas perspectivas financieras (2014-2020), el secretario de Estado ha insistido en la idea de que la tasa de transacciones bancarias que la Comisión Europea está estudiando poner en marcha sirva para financiar los fondos de cohesión.
Con esta tasa, los países darían menos dinero a la UE y podrían dedicar más recursos a aliviar su situación económica interna.
Ha asegurado que España no va a "abjurar" de la política de cohesión y aceptará ser contribuyente neto, aunque ha considerado necesario que regiones que tienen aún menor renta puedan seguir recibiendo ayudas durante un período de transición.
Antes de López Garrido, ha comparecido en la misma comisión el embajador de Polonia en España, Ryszard Schnepf, quien ha explicado los objetivos de la presidencia de turno de la UE que le corresponde a su país este semestre.
Schnepf se ha referido también a la crisis de los mercados financieros, que ha comparado con "una película policiaca donde desde el primer momento se conocen las víctimas, pero los autores quedan en la oscuridad hasta el final".
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