Un paso más hacia la resolución del conflicto de Nueva Rumasa. Los administradores concursales de aquellas empresas del grupo en suspensión de pagos se reunieron este viernes para analizar la situación del grupo.
El encuentro se consideró como una primera toma de contacto entre ellos y en él se ausentaron algunos de gestores de las 12 sociedades en situación de insolvencia, indicaron fuentes conocedoras del proceso.
Esta reunión se produjo un día después de que el fondo portugués Megafinance confirmara su interés en adquirir activos del grupo y de negociar deuda.
Una vez que se concreten las reuniones que el fondo luso mantenga con la familia Ruiz-Mateos y otras partes interesadas en el proceso, Megafinance contactará con el norteamericano Cerberus que, a su vez, se ha hecho con la deuda que el Santander y Banesto tienen en Nueva Rumasa.
La firma portuguesa estaría dispuesta a recomprarla, si bien se desconoce todavía su cuantía. Asimismo, el fondo luso informó de que iniciará los contactos con los administradores de las empresas de Nueva Rumasa que se encuentran bajo administración judicial.
Dichas gestiones se llevarán a cabo a través del abogado Ignacio García Macarrón.
Las mismas fuentes explicaron que durante el primer encuentro no se avanzó en ningún tema específico, ya que aún están a la espera de elaborar los respectivos informes patrimoniales de las empresas donde se concretarán los activos y la deuda de cada una de las sociedades.
Los informes concursales de las empresas con dificultades de Nueva Rumasa se entregarán en los respectivos juzgados entre finales de junio y principios de julio. Por ahora, los asistentes a la reunión establecieron el comité de trabajo y decidieron que se encontrarían de nuevo en las próximas semanas.
Por su parte, el fondo portugués concluyó esta semana la due diligence de algunas sociedades con el objetivo de una posible inversión en la compañía por más de 70 millones de euros. Entre las firmas que encuentra más atractivas figuran Dhul y Cacaolat, ambas en suspensión de pagos. Hasta el momento, Nueva Rumasa suma doce empresas en concurso, en tanto que otras tres están pendientes de admisión a trámite (Clesa, Chocolates Trapa y la sociedad patrimonial Clecao).
De los doce procedimientos iniciados, la familia Ruiz-Mateos ha sido apartada de la gestión de Grupo Dhul, Carcesa, Hibramer y Quesería Menorquina. Esta semana ha sido acordada la venta de esta última sociedad a directivos y trabajadores.
En Cacaolat, Elgorriaga, Complejo Bodeguero Bellavista (Garvey), Bodegas Valdivia, Zolilo Ruiz-Mateos, Bodegas Teresa Rivero y Unión de Grandes Bodegas, Nueva Rumasa mantiene las facultades de gestión y administración de su patrimonio, así como en Helados Dhul, según informaron a Europa Press en fuentes del grupo.
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