Los padres de La Ruperta y La Familia Telerín eran hermanos

Los hermanos Santiago Moro, creativo, y José Luis Moro, dibujante, han marcado la historia de la publicidad y en gran medida de la televisión en nuestro país. Sus creaciones: La Familia Telerín, La botilde, La Ruperta y otros tantos se han convertido además en iconos de toda una época y hoy los amantes del 'vintage' y de los 80 (y casi cualquier nostágico que se precie) rinden culto a su obra sin conocer apenas de quién (quiénes en este caso) nacieron las ideas.

Por todo eso, Madrid ha inaugurado una exposición bajo el nombre El anuncio de la Modernidad. Los míticos Estudios Moro (1955-1970) en homenaje a estos dos hermanos.

'La exposición intenta hacer justicia, es verdad que han quedado un tanto olvidados con el paso del tiempo. Hicieron un trabajo memorable y fueron unos pioneros en la publicidad televisiva en España', relata el comisario de la muestra y periodista Luis Fernandez.

Fernánez cuenta que a la hora de concebir este homenaje 'el problema de las pantallas de televisión es que quedan un poquito frías para una exposición y si tienes que poner unas 8 o 10 televisiones para mostrar diferentes anuncios para entretenerse viéndolos y comentádolos, hay que crear un entorno conforme a ello, por eso he hecho un marco publicitario de la época de anuncios de papel con las imágenes de las revistas para que se vea el contexto histórico en el que salían esos anuncios', describe el comisario. 'Fue una época en la que el desarrollismo español tuvo una publicidad extraordinaria'.

Para el periodista 'los hermanos Moro trabajaron con pocos recursos, pero de igual manera que hoy lo puede hacer un joven en su casa con un solo ordenador. Lo principal es la creatividad y considerar que tú eres bueno y que te entregas a ese trabajo como hicieron ellos'. Añade que 'ellos comenzaron en el comedor de su casa haciendo dibujos animados de forma artesanal y aquello se convirtió en un río económico y artístico'.

'Yo los conocí y nunca fardaron de que habían hecho La Familia Telerín o La Ruperta, es más, no hablaban de eso normalmente. Ellos hacían su trabajo lo mejor que sabían y lograron captar la atención de los españoles y de medio mundo, porque las televisiones hispanoamericas o portuguesas importaron el producto también', confiesa.

Algunas anécdotas de los creadores

La idea de La Familia Telerín se la propuso el director de Televisión Española a Santiago Moro a principios de los años 80. 'Le dijo que quería una imagen de una especie de señorita Rotenmeyer con un látigo que obligara a los niños a irse a la cama y él le dijo que eso le parecía horroroso. Así se le ocurrió la cancioncilla de 'Vamos a la cama que hay que descansar' y le encargó a su hermano los bocetos. Los presentaron y automáticamente lo hicieron', relata Ferández.

'El caso de la Ruperta es más singular todavía porque José Luis Moro vivía (vive) en el edificio de Chico Ibáñez Serrador y como ambos trabajaban para Televisión Española un día se encontraron en la escalera y Chicho le pidió un dibujo para la cabecera del Un, dos, tres, que ya se estaba emitiendo. José Luis Moro le contestó: '¿Y qué quieres que te haga?'. Como ha Chicho le daba igual le propuso: '¿Y una calabaza?'. Curiosamente los derechos se los quedó Chico Ibáñez porque como eran amigos nunca firmaron nada, luego llegaron a un acuerdo, pero durante años fueron de Chicho'.

Además, Luis Fernández cuenta que los hermanos Moro 'no eran personas que hablaban de la fama ni del dinero, y ahora Fernando Moro, hijo de José Luis y que hoy trabaja para Disney, me cuenta que su padre siempre estaba regalando Rupertas a sus amigos. Otro que piensa en el mercado pues no las regala, las vende'.