Los socialistas plantean el empleo como prioridad si llegan al Gobierno

Lisboa, 27 abr.- El secretario general del Partido Socialista (PS) luso, António José Seguro, antepuso un "pacto por el empleo" entre las fuerzas políticas y sociales de larga duración, hasta 2020, como eje de un futuro Ejecutivo bajo su mando.

"El nuevo rumbo tiene una prioridad: empleo, empleo, empleo", afirmó en el discurso de la apertura del XIX Congreso Nacional del PS, que se celebra hasta mañana en la ciudad norteña de Santa Maria da Feira.

En este cónclave, los socialistas preparan la estrategia política del partido y los 1.800 delegados participantes elegirán este domingo, por voto secreto, a los máximos órganos dirigentes del grupo.

El líder de la principal fuerza de la oposición en Portugal propuso como objetivos de ese gran acuerdo sobre el empleo el aumento de la tasa de empleo a más del 70 % de la población activa y la reducción a la mitad del paro juvenil, señaló.

Para ello, abogó por un nuevo contrato social basado en un nuevo consenso entre partidos políticos, sindicatos y la patronal.

En materia económica, señaló que su partido da prioridad a una economía del conocimiento, con una fuerte base tecnológica y a favor del medio ambiente.

También pidió una mayor regulación de la competencia para proteger los derechos de los consumidores, reducir las dependencias externas y una internacionalización aún mayor del tejido empresarial del país.

En el discurso, Seguro resolvió su posición sobre la deuda externa de su país y reafirmó que su partido cumplirá con la deudas de su país en un futuro Ejecutivo.

En el plano político, insistió en pedir elecciones anticipadas y aseguró que sólo formaría parte de un Gobierno "por voluntad de los portugueses".

De esta manera, alejó de nuevo la posibilidad de pactar con el Gobierno de Pedro Passos Coelho, del Partido Social Demócrata (PSD, centro-derecha).

Portugal, que sufre la peor crisis económica en cuatro décadas de democracia, vive su tercer año en recesión y arrastra un lustro de escalada del desempleo, que se sitúa en el 18 % y que duplica las tasas de 2008, cuando se situaba en el 7,6 %.