Los marroquíes residentes en el extranjero enviaron a su país un récord de 110.700 millones de dirhams, lo que supone al cambio unos 10.200 millones de euros en 2022, lo que supone un aumento del 16% respecto al año anterior.
Con Francia a la cabeza seguido de España
El último informe anual de la institución pública Oficina de Cambios, difundido este jueves, indica que este incremento se debe al aumento de las remesas procedentes de los principales países emisores, especialmente Francia, que aportó casi 500 millones de euros más que en 2021, un 18% de aumento.
Asimismo, España contribuyó con 138 millones de euros más (11% del crecimiento); Italia, con 250 millones de euros más (+ 26%) y Arabia Saudí, con 148 millones de euros más (+ 23,5%). Francia sigue siendo el primer país de remesas, con una participación del 32,2% del total, seguida de España (13,4%), Italia (11,5%) y Arabia Saudí (7,6%).
El informe destaca que en los últimos cinco años, las remesas procedentes de Canadá han registrado el mayor crecimiento anual medio (+ 28%), seguidas de las de España (+ 27,6%) y las de Italia (+ 20,3%).
Un estudio del banco central marroquí Bank al Maghrib y el Banco Mundial, destaca que más del 80% de los envíos de los emigrantes -que constituyen una importante fuente de divisas para el país- son destinados a familiares y constituyen una fuente de ingresos constante para familias vulnerables.
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