El gigante tecnológico Microsoft ha anunciado el despido de 1.900 de sus empleados en Microsoft Gaming, su sección de juegos. La empresa ha comunicado el recorte de plantilla tan solo tres meses después de la compra por su parte de la compañía de videojuegos Activision Blizzard, que logró cerrar el pasado 13 de octubre tras un largo proceso.
La multinacional estadounidense ha señalado que se trata de "una decisión dolorosa", pero que se ha visto obligada a llevar a cabo estos despidos para mantener unos costes sostenibles con los que poder continuar en su senda de crecimiento, según explica en un comunicado emitido este jueves.
Las 1.900 personas que abandonaran su puesto dentro de la plantilla de juegos de la empresa, que actualmente cuenta con un total de 22.000 empleados, supone un recorte del 9% del total de equipo. En el texto publicado, añaden que los trabajadores "deberían estar orgullosos por lo conseguido", ya que jugaron "un importante papel en el éxito de Activision Blizzard, ZeniMax y Xbox".
Microsoft no aclara en que sedes se dará el recorte
Microsoft agradece a los afectados "toda su creatividad, pasión, y dedicación que han traído a nuestros juegos, a los jugadores y a los colegas", y promete que dará "pleno apoyo a los que se vean impactados por la transición", incluyendo los beneficios que recojan las leyes locales.
El comunicado que explica las decisión no especifica en qué sedes de Microsoft se llevarán a cabo los despidos, pero la compañía promete también que los despedidos anunciados serán tratados "con el respeto y la compasión consistente con nuestros valores".
