Madrid, 14 ene.- La inmobiliaria Reyal Urbis, en concurso de acreedores desde marzo de 2013, ha anunciado hoy su intención de presentar una propuesta de convenio para salir de la situación de insolvencia en la que se encuentra inmersa.
La compañía presidida por Rafael Santamaría presentará un convenio dentro del plazo establecido y una vez que obtenga la aprobación del consejo de administración, tal y como ha informado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
De hecho, el Juzgado de lo Mercantil nº 6 de Madrid que tramita el concurso de acreedores declaró finalizada la fase común del proceso el pasado 13 de enero y acordó abrir la fase de convenio.
El convenio podrá presentarse tanto por Reyal Urbis como por los acreedores cuyos créditos superen un quinto del pasivo total de la inmobiliaria hasta el próximo 13 de febrero, un mes antes a la fecha de vencimiento del plazo establecido para las adhesiones o votos en contra que finalizará el 13 de marzo.
Con motivo de los resultados del tercer trimestre de 2014, Reyal Urbis explicó que trabajaba en un plan de viabilidad con la intención de alcanzar un acuerdo con todos sus acreedores y firmar un convenio a la mayor brevedad posible.
El 4 de marzo de 2013, el Juzgado madrileño declaró el concurso voluntario de acreedores de la inmobiliaria Reyal Urbis, que según el informe de la administración concursal tiene un déficit patrimonial de 1.699,3 millones.
Ese mismo año, Inveryal -la sociedad patrimonial de Rafael Santamaría y propietaria del 70,2 % de la inmobiliaria- fue declarada en concurso voluntario de acreedores.
De acuerdo con la compañía, y haciendo referencia a una tasación de Jones Lang Lasalle, el valor de los activos de Reyal Urbis asciende a 1.629 millones. A cierre de mayo, el valor de mercado de los terrenos e inmuebles terminados era de 1.195 millones.
Reyal Urbis perdió 483,6 millones a cierre del tercer trimestre de 2014, un 35 % más que los números rojos registrados en el mismo periodo de 2013 debido a mayores gastos financieros por el concurso, a las provisiones y al deterioro de activos.
El resultado de explotación arrojó unas pérdidas de 393,4 millones, el 41 % más que el dato negativo de un año antes, debido al incremento en los devengos de deuda por intereses indemnizatorios.
Por su parte, a cierre de septiembre, la deuda financiera neta ascendía a 2.669,1 millones.
La junta de Reyal Urbis acordó congelar la retribución de los consejeros para 2014. En 2013, Rafael Santamaría cobró 1,3 millones de euros, el 13,6 % más que un año antes.
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