El impuesto sobre el valor añadido (IVA) grava las operaciones de consumo de bienes y servicios y se trata de un tributo indirecto. Es decir, se aplica sobre todas las personas con independencia de sus circunstancias económicas. Actualmente, el tipo general del IVA es del 21%, mientras que sobre ciertos bienes y servicios se aplican tipos reducidos del 10% o del 4%.
En concreto, estos porcentajes se aplican sobre la entrega de bienes y prestaciones de servicios, las adquisiciones intracomunitarias de bienes y las importaciones de bienes. Eso sí, siempre que las operaciones se produzcan en la Península e Islas Baleares.
De esta forma, quedan excluidas de su aplicación las operaciones realizadas en Canarias, Ceuta y Melilla. Esta exclusión permite a quienes residen en estos territorios recuperar el importe de IVA de las compras realizadas en la Península o Islas Baleares. Por ejemplo, durante un viaje. Y lo mismo ocurre con residentes fuera de la Unión Europea.
Devolución del IVA
La devolución del IVA a viajeros también se conoce como ‘tax free’ y permite obtener de vuelta el importe de este impuesto pagado por cualquier operación con IVA español. No obstante, en primer lugar, la persona deberá acreditar su residencia fuera de la Unión Europea o en Canarias, Ceuta y Melilla.
Además, la Agencia Tributaria, especifica que los bienes adquiridos “no deben constituir una expedición comercial”. Es decir, debe tratarse de una compra puntual, no habitual y de uso personal, que no sean destinados a su comercialización. Y los bienes deberán estar fuera del territorio en un plazo de tres meses desde que se realiza la entrega.
Por otra parte, la devolución del IVA se aplicará a los bienes que “salgan efectivamente del territorio de la Unión Europea”. Esto excluye a cualquier tipo de servicios -como alojamiento, restaurantes, alquiler de coches...- y a los bienes consumibles –como alimentos o bebidas-. La devolución tampoco se aplicará cuando se hayan comprado bienes destinados al equipamiento o avituallamiento de cualquier medio de transporte de uso privado (por ej. Neumáticos y combustible).
¿Cómo solicitar la devolución?
Una vez se cumplen los requisitos, para obtener la devolución del IVA la persona debe justificar las compras. Por ello, es necesario pedir en los establecimientos el formulario DIVA. Desde 2019 es un requisito obligatorio, por lo que si en una tienda no cuentan con ello la factura no será válida. Para completar los datos, los interesados deben presentar su pasaporte en vigor.
La validación del formulario se realizará ya en el aeropuerto o puerto, por lo que es importante guardar todas las facturas y formularios de las compras hasta el final del viaje. Además, de nuevo se deberá presentar el pasaporte, junto a las facturas, el formulario DIVA, la tarjeta de embarque y los bienes por los que solicita la devolución. Para este último punto es importante realizar la validación antes de facturar.
La tramitación se realiza directamente en las máquinas automáticas. La Agencia Tributaria explica que “los terminales interactivos suelen encontrar cerca de las oficinas de aduanas, situadas en los puntos de salida del territorio español (aeropuertos internacionales, puertos marítimos y fronteras terrestres)”.
El sistema deberá validar el formulario DIVA. Si no da el visto bueno habrá que acudir al servicio de aduanas para confirmar la validación que permite el reembolso. Una vez validada, ya se podrá realizar la solicitud de la devolución.
Liquidaciones necesarias en Canarias, Ceuta y Melilla
Para los residentes fuera de la Unión Europea, una opción es hacerlo en una tienda ‘tax free’ dentro de la zona de embarque, aunque en este caso está sujeto a comisión. Otra opción es solicitarlo directamente a las tiendas las que se hicieron las compras. Para ello, hay que enviar la factura debidamente sellada o bien únicamente indicación del formulario DIVA.
En el caso de los residentes en Canarias, Ceuta y Melilla, la devolución no será completa, sino que está sujeta a la liquidación de los impuestos correspondientes a sus territorios. Esto es el IGIC, el impuesto que se tributa en Canarias, y el IPSI, en el caso de las ciudades autónomas.
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