El presidente del Gobierno italiano, Giuseppe Conte, consideró insuficiente el fondo de 500 millones puesto a disposición por la sociedad Atlantia para ayudar a los damnificados por el derrumbe de un viaducto en Génova (noroeste), que causó 43 víctimas.
Conte explicó en una entrevista publicada este martes en el diario 'Corriere della Sera' que la ayuda de Atlantia "es muy modesta respecto a los beneficios conseguidos en los últimos años y podrían al menos cuadruplicarla o quintuplicarla". Es decir, alcanzaría un montante de entre 2.000 y 2.500 millones.
El jefe de Gobierno de Italia advirtió que "estas sumas pueden ser aceptadas solo como parcial resarcimiento", al margen del procedimiento para retirar la concesión de la A10 a la sociedad que ha abierto el Gobierno italiano.
El primer ministro adelantó que se están estudiando las posibles sanciones a Autostrade, que pertenece al grupo Atlantia, y que se encargaba del mantenimiento de la autopistas cuyo viaducto se derrumbo. "Este informe está en mi cartera y ha viajado conmigo estos días", aseguró.
Respecto a la cesión de la concesión y la petición de resarcimiento por parte de Autostrade, Conte destacó que el Gobierno se está preparando para que "la concesionaria no pueda obtener ninguna ventaja económica mas respecto a las ya obtenidas con la concesión". También aseguró que ya han recibido ofertas para reconstruir el puente si finalmente no se ocupa Autostrade.
Sobre la posible nacionalización de la red de autopistas italianas, el primer ministro señaló que se "estudiará con atención cuales son las modalidades mejores para proteger el interés público". "De todas maneras hay que buscar una alternativa a las malas privatizaciones y a un sistema de concesiones que no se ha realizado nunca", añadió
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