Fallido acuerdo entre Intel y Tower Semiconductor. El gigante estadounidense de los microprocesadores y el fabricante israelí de chips analógicos y circuitos integrados Tower Semiconductor cancelan su pacto de compra. Así lo ha confirmado Intel, donde ha avisado de la rescisión del acuerdo realizado en febrero de 2022 por 5.400 millones de dólares (4.945 millones de euros) después de no obtener de manera oportuna las aprobaciones regulatorias requeridas.
De acuerdo con los términos del acuerdo de fusión y en relación con su rescisión, Intel pagará a Tower una indemnización por la rescisión del acuerdo de compra de 353 millones de dólares (323 millones de euros). "Continuaremos buscando oportunidades para trabajar juntos en el futuro", señaló Pat Gelsinger, consejero delegado de Intel.
Después de un principio de acuerdo
El acuerdo se remonta a principios del año pasado cuando ambas compañías decidieron empezar una relación mediante una operación que se esperaba cerrar en el curso de los siguientes doce meses, es decir, en 2023.
La operación, aprobada por unanimidad por los consejos de administración de ambas empresas, contemplaba el pago de 53 dólares en efectivo por cada título de Tower Semiconductor, lo que suponía una prima del 60% respecto del precio de las acciones de la empresa en la sesión de aquel momento.
La compañía de Santa Clara tenía la intención de financiar la adquisición con efectivo de su balance y confiaba en que la transacción aumentara inmediatamente el beneficio por acción.
"La cartera de tecnología especializada de Tower, el alcance geográfico, las relaciones profundas con los clientes y las operaciones de servicios prioritarios ayudarán a escalar los servicios de fundición de Intel y avanzar en nuestro objetivo de convertirnos en un proveedor importante con capacidad de fundición a nivel mundial", dijo Pat Gelsinger, consejero delegado de Intel.
"Este acuerdo permitirá a Intel ofrecer una variedad convincente de nodos de vanguardia y tecnologías especializadas diferenciadas en nodos maduros, desbloqueando nuevas oportunidades para clientes actuales y futuros en una era de demanda sin precedentes de semiconductores", añadió. Un acuerdo que finalmente no se ha llevado a cabo por problemas relacionados a los cumplimientos requeridos y que la multinacional no ha sido capaz de hacer frente.
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