El vicepresidente y consejero delegado de Melía, Gabriel Escarrer, ha confirmado su objetivo de abrir unos 30 nuevos hoteles, representativo de un crecimiento aproximado de 7.000 habitaciones. El grupo hotelero ha apuntado que espera obtener un resultado bruto de explotación (Ebitda) de, al menos, 525 millones de euros en el ejercicio de 2024, según ha adelantado el vicepresidente y consejero delegado de la sociedad, Gabriel Escarrer Jaume, con motivo de su discurso en la junta general de accionistas que se celebra este jueves.
De igual modo, en el orden del día de esta junta de accionistas, la hotelera ha propuesto como uno de los puntos del orden del día la aprobación de la distribución de un dividendo con cargo a reservas voluntarias. Este regreso al dividendo se realizará de manera progresiva hasta recuperar la política de retribución al accionista precovid, en la que se destinaba un 'pay-out' (porcentaje del beneficio neto que se dedica a dividendo) del 30%.
Específicamente, en materia de objetivos financieros, la previsión de la hotelera balear es obtener un Ebitda no inferior a 525 millones de euros y reducir el ratio de deuda neta por debajo de 2,5 veces.
El pago del último dividiendo por parte de la compañía dirigida por Gabriel Escarrer tuvo lugar el 9 de julio de 2019, fecha en la que procedió al pago de un dividendo ordinario de 0,18 euros por título. Después tras la llegada del covid se congeló el pago de este dividendo. El consejo de administración de la compañía propondrá a sus accionistas la vuelta al dividendo tras varios años de "sólida" recuperación que le ha permitido mejorar en un 8,3% sus resultados en 2023 alcanzando un beneficio neto de 130 millones de euros.
