El colectivo de activistas húngaros que forzaron al primer ministro conservador Viktor Orban a retirar la candidatura de Budapest de la carrera a los Juegos Olímpicos de 2024 anunció el domingo que se constituirán en partido político para las elecciones legislativas de 2018.
"La izquierda y la derecha solo han sido capaces de dividir el país", lamenta el Movimiento Momentum en su página de Facebook, destacando su voluntad de posicionarse fuera de la dicotomía izquierda-derecha.
Desconocido hasta hace pocos meses, este grupo de jóvenes militantes, la mayoría veinteañeros y treintañeros, se estrenó con una breve pero efectiva campaña con la que lograron que Budapest se retirara del concurso para albergar los Juegos de 2024, en el que también compiten París o Los Ángeles.
Momentum logró recoger 266.000 firmas contra la candidatura, casi el doble del necesario para poner en marcha un referéndum local, lo que llevó al gobierno a tirar la toalla a finales de febrero.
El colectivo, que celebró su asamblea general este fin de semana, ha elegido al frente del nuevo partido al líder de la campaña anti Juegos Olímpicos, Andras Fekete-Gyor, de 28 años, y afirma que quiere presentar candidatos en todas las circunscripciones para las legislativas de 2018 en el país.
A falta de un programa más exhaustivo, por el momento el colectivo se ha pronunciado a favor de una mayor cooperación con los otros estados miembros de la UE frente a la política poco cooperante de Orban, sobre todo en materia migratoria.
Aunque se muestra crítico con la cercanía del actual primer ministro húngaro con Vladimir Putin, tampoco es favorable a la oposición de izquierda húngara, a la que ve incapaz de representar una verdadera alternativa política.
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