Aralar acusa al PNV de "poner una sordina" al derecho a decidir y el proceso de paz en esta legislatura

El presidente de Aralar, Patxi Zabaleta, ha acusado al PNV de "poner una sordina" al derecho a decidir y el proceso de paz durante esta legislatura, cuestiones ambas que ha abogado por afrontar en la siguiente. Además, ha advertido a los jeltzales de que la agenda vasca "o empieza con el derecho a decidir y a través del derecho a decidir, o no es ni agenda, ni vasca ni nada".

En rueda de prensa en San Sebastián para hacer balance de la última legislatura vasca, el presidente de Aralar, Patxi Zabaleta, y la secretaria general de Aralar, Rebeka Ubera, han denunciado que, en los últimos cuatro años, se han "retrasado la política en la Comunidad Autónoma Vasca respecto a lo que sucedía hace diez años". "Estamos, otra vez, paralelos a la situación de 1986, por poner un ejemplo", ha apuntado.

En este sentido, Zabaleta ha señalado que hace unos años "había un consenso de que el Estatuto se había quedado obsoleto y que era imprescindible renovar las estructuras de Estatuto" y así se creía que los agentes sociales y las fuerzas políticas "tenían que llegar a un consenso" al respecto, y esa renovación "tenía que contener necesariamente el derecho a decidir y los resortes necesarios en el campo del quehacer político para poder responder a los desafíos que se han venido sucediendo".

A su juicio, todo esto se ha "tratado de olvidar" y el Gobierno vasco del PNV ha intentado "ponerle una sordina durante esta legislatura", algo que también cree que ha sucedido con "la construcción de la paz". Al respecto, ha señalado que la sociedad vasca y la del Estado "tienen la convicción de que estamos en paz y eso tiene que tener unas consecuencias y se tiene que acabar el proceso de paz".

En este contexto, ha criticado que, "de una manera totalmente irresponsable", el Gobierno central "no solo no contribuye a la paz, sino que la obstaculiza una y otra vez", algo que supone "un argumento dialéctico que debe ser sobrepasado por la dinámica política tanto de la comunidad autónoma vasca, como de Navarra", aunque "no ha sucedido así".

El presidente de Aralar ha exigido "acabar con la figura de los presos políticos" que, "desgraciadamente", el Tribunal Constitucional va a "volver a empezar a crear en Cataluña".

Además, ha señalado que el desarme de ETA "hay que darlo por hecho" y "la verdad y la memoria abordarlas desde la libertad democrática".

Patxi Zabaleta ha afirmado que "el tono más peyorativo" en el balance del ejercicio político de esta legislatura habría que hacerlo en relación "al derecho a decidir y los derechos nacionales de Euskal Herria, porque se ha pretendido también ponerles una sordina y usar otros conceptos como el de agenda vasca".

Al respecto, ha recordado al PNV que "la agenda vasca o empieza con el derecho a decidir y a través del derecho a decidir o no es ni agenda, ni vasca, nada", ya que "no puede sostenerse ninguna reivindicación desde el punto de vista democrático más que en el derecho a decidir", que es también "la actualización, la modernización y la democratización de lo que se han venido a denominar derechos históricos o fueros".

Por otra parte, ha censurado la "falta de coraje político" del Ejecutivo vasco liderado por Iñigo Urkullu a la hora de "defender los derechos económicos y sociales".

Respecto a los primeros, Zabaleta ha lamentado que "sectores fundamentales en la economía vasca como, por ejemplo el metalúrgico, o la pesca, hasta lo que representan las cooperativas, han sido durante estos cuatro años objeto de un desmontaje sin que el Gobierno vasco haya sido capaz de adoptar iniciativas vigorosas", mientras que, en lo que respecta a lo social, "se desprecia la mayoría de la representación sindical".

A ello ha añadido que, en lo que respecta a la cultura y el euskara, "se han notado similares actitudes" por parte del Ejecutivo jeltzale. "Nos gustaría compararnos con Cataluña", ha reflexionado, para añadir que "nada conviene más a la clase trabajadora española y a los trabajadores de España que la independencia de las naciones que así lo piden, incluida Cataluña y Euskal Herria".

PRÓXIMA LEGISLATURA

En lo que respecta a la próxima legislatura, Ubera ha señalado que va a ser "muy importante", ya que supondrá un "punto de inflexión", y por ello, Aralar afronta las elecciones autonómicas del próximo 25 de septiembre en el seno de la coalición EH Bildu "con mucha ilusión".

En este sentido, Zabaleta ha indicado que los desafíos a abordar son "muy concretos", y, entre ellos, ha apuntado a la necesidad de "acabar el proceso de paz de manera digna".

El presidente de Aralar ha señalado que "el desiderátum, primero, sería el diálogo entre las fuerzas políticas, entre las instituciones, pero sabido es que solo se puede dialogar con el que quiere, y la paz vasca se está haciendo sin el diálogo de algunas de las fuerzas de Madrid y, en muchas ocasiones, por tanto, en contra de la actuación de esas fuerzas de Madrid", en alusión al PP.

En este contexto, ha subrayado que, cuando el diálogo "es imposible", hay que "avanzar también hasta sin diálogo", y así, "la paz se está haciendo sin el diálogo, sin el concurso del PP y, en muchas ocasiones, a pesar del PP".

También ha señalado que hay que solucionar "unos escollos, dificultades, que luego no son reales" y ha apuntado el desarme de ETA que "hay que dar por hecho". "Haría falta también un pronunciamiento en este sentido de la organización ETA, pero bastaría con eso, igual que bastó para hacer el cese de la actividad armada", ha indicado, al tiempo que ha abogado por el reconocimiento de "todas" las víctimas, cuestiones ambas "deficientes" de la última legislatura.

Por otro lado, ha apuntado como reto "dar cauce" al derecho a decidir, que es algo que "todos los demócratas tiene que reconocer", porque es "un contenido inexcusable de la democracia" y ha confiado en que las fuerzas políticas del Estado "avancen en ese sentido y se puedan dar pasos, creando las estructuras necesarias, en base a la solidaridad, de la nueva situación institucional que se necesita".

Asimismo, como tercer punto a abordar ha apuntado a la economía, que requiere "iniciativa y coraje para defender sectores en riesgo", que no están siendo defendidos con "la excusa de que no se tiene competencia", y los derechos sociales. Para Zabaleta la "paz social requiere del realismo social", es decir, que los sindicatos "sean tenidos en cuenta por muchas dificultades que haya".