Su propia hija, Chelsea Clinton, ha presentado a Clinton tras un emotivo discurso definiéndola como su "madre y heroína" y la "próxima presidenta" de Estados Unidos.
Después de la intervención de su hija, Clinton ha salido al escenario para agradecer el apoyo a Chelsea y a su marido, el expresidente Bill Clinton, a quien le ha recordado el día que se conocieron "en aquella biblioteca hace 45 años" --en referencia a la biblioteca de la Universidad de Yale, donde ambos estudiaron Derecho--.
Acto seguido se ha dirigido a los líderes estadounidenses, para acabar agradeciendo a un serio y visiblemente incómodo Bernie Sanders.
"Tu campaña ha inspirado a miles de americanos", ha afirmado, antes de puntualizar que lo ha hecho "principalmente ente los jóvenes". "Pusiste por delante cuestiones de justicia y economía social. Y (jóvenes), quiero que sepáis que os escucho", ha añadido.
"Vuestra causa es nuestra causa: nuestro país necesita vuestras ideas, vuestra energía y vuestra pasión", ha añadido, antes de apuntar que estando juntos "es la única manera de la que podemos impulsar un cambio real" para el país.
Apelando a la unidad para arreglar al país, argumentando que "los estadounidenses no somos de decir 'Yo sólo puedo arreglarlo'", Clinton ha aceptado oficialmente la nominación a la Casa Blanca, convirtiéndose en la primera mujer candidata a la Presidencia de Estados Unidos.
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