Al comienzo del juicio, celebrado el pasado 22 de junio, el procesado, de 35 años, se conformó con las penas propuestas por el Ministerio Fiscal, que inicialmente solicitaba 21 años de prisión.
Con anterioridad al comienzo de la vista oral, el encausado había consignado 20.000 euros para satisfacer la responsabilidad civil, por lo que se le ha aplicado la atenuante muy cualificada de reparación del daño.
En concreto, ha sido condenado por dos delitos de abuso sexual a menor de trece años con acceso carnal a cinco años de prisión por cada uno de ellos, por un delito continuado de abuso sexual sin acceso carnal a tres años y por un delito continuado de corrupción de menores a dos años, ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN).
El inculpado cumplirá ocho años de prisión en un centro penitenciario y el resto de la pena se sustituirá por su expulsión de España, con una prohibición de retorno durante 10 años.
Según consta en la sentencia, el acusado compartía vivienda con su esposa, su cuñada y la hija de esta en Pamplona. Como la madre tenía "plena confianza" en su cuñado, este cuidaba con frecuencia de la niña. Fue entonces, al quedarse ambos a solas, cuando se produjeron los abusos.
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