Según ha informado la Diputación en una nota, García ha atendido a la invitación de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP). Se trata de un foro para elaborar una estrategia nacional contra la despoblación de muchos territorios de la España interior, fundamentalmente, con la participación de políticos y expertos.
García ha puesto como ejemplo de una política válida al respecto la creación del consejo de alcaldías en el actual mandato del equipo de gobierno provincial, que ha permitido que los responsables municipales de la provincia hayan planteado soluciones a problemas comunes.
A través de este foro del consejo los municipios con población inferior a los 20.000 habitantes han recibido más de 12,5 millones de euros en planes de empleo específicamente diseñados para ellos. También pueden disponer de una asistencia económica y jurídica, y participar en la aplicación de los planes provinciales, con el objeto de que las infraestructuras que se fomenten sean las más apropiadas a las necesidades que plantean los alcaldes.
Para Irene García no contribuye al papel que debe desempeñar la Diputación en la fijación de la población la pérdida de la gestión de los fondos europeos. "La ejecución de los Feder contribuía a la cohesión territorial, permitiendo crear servicios públicos, con la correspondiente creación de empleos".
La presidenta de la Diputación ha vuelto a denunciar que actualmente las disposiciones de la administración central "no permitan reinvertir el superávit total de los pequeños municipios y de la Diputación en inversiones productivas, que son muy necesarias en las ciudades y pequeñas poblaciones".
A este congreso de Huesca ha asistido más de un centenar de responsables locales interesados en la búsqueda de soluciones y en encontrar el camino para "poblar la despoblación" más allá de las respuestas puntuales.
En el conjunto de España, actualmente 1.286 municipios tienen menos de 1.001 empadronados. Suponen el 16 por ciento del total. En la clasificación de provincias que más población han perdido en el último año la encabeza Zamora (-1,57%), seguida de Ávila (-1,24%), Orense (-1,22%), Ciudad Real (-1,11%), León (-1,10%), Teruel (-1,06%), Segovia (-1,05%), Soria (-099%) y Salamanca (-0,97%).
Entre 2015 y 2016 España ha perdido 67.374 habitantes. Hay 4.000 municipios en peligro de extinción, 1.286 subsisten con menos de 100 habitantes y 2.652 no llegan a 501 empadronados. En 14 provincias más del 80 por ciento de sus municipios tienen menos de mil habitantes.
La provincia en 2016 tenía 1.239.889 habitantes (400 menos que un año antes). El máximo histórico en la provincia se midió en 2012 (1.245.164), pero en los últimos años se ha estabilizado en torno a los 1.240.000. La provincia cuenta con una peculiaridad, con un número relativamente reducido de municipios (solo 44), ocho de los cuales superan los 50.000 habitantes.
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