La consellera de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias de la Generalitat, Dolors Bassa, y el tercer teniente de alcalde de Barcelona, Jaume Asens, han reafirmado su compromiso a favor de la acogida de refugiados, "desgraciadamente sin la complicidad del Gobierno" central, al que la consellera ha afeado que no transfiere ninguno de los recursos que recibe de la UE para la acogida.
"No nos acepta como participación comprometida y activa", ha lamentado Bassa, en un acto en el Saló de Cent del Ayuntamiento en el que tanto la consellera como el representante del consistorio han remarcado la necesidad de establecer vías seguras de llegada y de cumplir los compromisos de acogida.
Asens ha acusado al Estado de destinar a las políticas de fronteras estos recursos europeos, y ha mostrado su "indignación y vergüenza ante la barbarie que provocan las fronteras europeas", que dejan a miles de personas desposeídas de raíces y que pierden su vida en el Mediterráneo, al que ha calificado de fosa común, así como en un camión frigorífico y en la playa del Tarajal.
"Esto tiene que interpelar a los que estamos en las instituciones. Tenemos que intentar estar a la altura aunque la competencia no sea nuestra", y hacer los mayores esfuerzos, y ha rememorado que desde ciudades europeas han hecho frente común, así como con la Generalitat.
"RETO TITÁNICO"
La consellera ha proclamado el objetivo principal de evitar que haya conflictos de los que huyen estas personas, "un reto titánico para todos", para el que ha dicho que hay que buscar la unidad de la lucha contra lo que es inaceptable.
En su discurso, Bassa ha recordado la historia de los refugiados, que se inició con los judíos y musulmanes expulsados del Estado, y que se plasmó en la obra de escritores y artistas como Antonio Machado y Pablo Neruda, entre muchos otros, y ha agradecido la tarea de los centenares de catalanes que se han movilizado actualmente para ayudar a refugiados en campos, como la ONG Proactiva Open Arms.
El director del Comité Catalán del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, Joan Raventós, ha conducido el acto, en el que ha afirmado que el Servicio de Atención a Inmigrantes, Emigrantes y Refugiados (Saier) de Barcelona ha duplicado el número de atendidos entre 2015 y 2016, principalmente procedentes de Ucrania, Venezuela y Pakistán.
Ha aportado su testimonio una refugiada transexual de Honduras, Carol, que ha pedido un trato igual a las personas del colectivo LGTBI; Tatiana, de Ucrania, ha lamentado las dificultades de encontrar trabajo con la tarjeta roja por desconocimiento de los empresarios, y Anhamed, del Sáhara Occidental, ha criticado que los saharauis no están reconocidos por otros países y son apátridas.
En la conmemoración, ha actuado la coral Voces Con Sentidos, un proyecto que aúna derechos humanos con música, y se ha leído un manifiesto que ha recogido que Europa, cuando construye vallas, "gira la espalda" a personas que buscan una oportunidad de sobrevivir lejos de su casa.
"Exigimos una solución global y estructural por parte del Estado, que garantice la aplicación efectiva del derecho de asilo" y mejore y amplíe las leyes que regulan el derecho de asilo y su aplicación efectiva, ha afirmado el manifiesto, que ha leído una refugiada armenia.
El texto también ha recordado que a pesar de que en Catalunya hace tres años y medio que hay un plan de protección internacional aprobado por la Generalitat, este "se encuentra en las últimas", ya que sigue sin definir un plan de acción con líneas de actuación claras, indicadores para medir su cumplimiento y dotación presupuestaria para realizarlo.
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