La vicesecretaria de Estudios y Programas del PP, Andrea Levy, ha asegurado este viernes que se "asustó" al ver que el exsecretario general del PSOE Pedro Sánchez está dispuesto a pactar con independentistas, Podemos y con "cualquier" proyecto para que le aúpen al Palacio de la Moncloa. A su entender, el PSOE "no merece entrar en la antipolítica".
"Me parece que se va a dejar coleta", ha exclamado Levy en una entrevista en La Sexta, recogida por Europa Press, después de que Sánchez defendiera anoche que el PSOE debe acercarse a Podemos y afirmase que el sistema financiero, algunas empresas del IBEX y un medio de comunicación confabularon para que no pudiera haber un Gobierno alternativo al de Rajoy.
Levy ha señalado que Pedro Sánchez circula por una autopista "sin retorno", en la que está "dispuesto a dejarse acompañar en ese coche" por cualquier proyecto "para que al final le aúpen a ser presidente de la Moncloa. "Ese conductor es un peligro para la seguridad vial de nuestro país", ha aseverado.
SÁNCHEZ PUSO EL "VENTILADOR"
La dirigente del PP ha explicado que su formación quiere un PSOE "fuerte, responsable y moderado" y ha resaltado que este partido, que ha sido "fundamental" para la historia de España, "no merece entrar en la antipolítica" de Podemos. "No es esperanzador que el PSOE se proyecte en esos postulados de Podemos", ha abundado.
La responsable de Estudios y Programas ha criticado que Sánchez no hiciera autocrítica y se dedicara a poner el "ventilador" y echar "la culpa a los demás", cuando, a su juicio, el PSOE "quizá" está en esa situación porque "abrió la puerta" al partido morado en ayuntamientos y comunidades.
A su entender, Pedro Sánchez insiste en el "error" cuando el PSOE debe centrarse en "fortalecer" su proyecto ideológico y llevar a cabo un "debate de ideas" dentro del espectro socialista en la socialdemocracia europea.
DEJAR AL LADO LA "POLÍTICA DE TRINCHERA"
Finalmente, ha indicado que se abre una etapa en la que es necesaria la "responsabilidad de todos" para lograr objetivos comunes en favor del interés general de los españoles, dejando de lado la "política partidista y de trinchera".
En este punto, ha recriminado al diputado de ERC Gabriel Rufián que, con sus duras críticas al PSOE en el debate de investidura, quiera convertir el Parlamento en "un bar de monólogos". Según ha dicho, es "mal tiempo para hacer política desde el odio, la rabia y la confrontación".
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