La ONU denuncia el hallazgo de otras 17 fosas comunes en la región congoleña de Kasai

  • En total se han encontrado 40 fosas que serían obra del Ejército en su lucha contra la milicia Kamuina Nsapu
EUROPA PRESS
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Los investigadores de la ONU en República Democrática del Congo (RDC) han confirmado la existencia de otras 17 fosas comunes en la provincia de Kasai Central, escenario de enfrentamientos desde el pasado mes de agosto entre la milicia local Kamuina Nsapu y las fuerzas de seguridad, según ha informado este miércoles la oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos.

El hallazgo de las nuevas fosas, que eleva a 40 el total de las documentadas por la ONU en Kasai Central y Kasai Oriental desde agosto, tuvo lugar durante una misión de investigación en la citada provincia entre el 5 y el 7 de abril por personal de la Oficina Conjunta de Derechos Humanos de la ONU y la Policía de la ONU.

En concreto, según el comunicado del Alto Comisionado, quince de las fosas fueron halladas en un cementerio en la localidad de Tshimbulu y las dos restantes en Tshienke. De acuerdo con la información recabada por el equipo de la ONU, fueron soldados del Ejército congoleño (FARDC) quienes cavaron las fosas tras enfrentamientos con presuntos milicianos de Kamuina Nsapu entre el 26 y el 28 de marzo en los que murieron al menos 74 personas, incluidos 30 niños.

Por otra parte, el equipo de la ONU también ha recabado información sobre la muerte de al menos 40 personas, entre ellas once niños y doce mujeres, a manos de los soldados congoleños en Kananga, la capital provincial, entre el 28 y el 30 de marzo, mientras que otras 21 personas resultaron heridas.

La mayoría de las víctimas fueron abatidas en sus hogares durante los registros casa por casa realizados por los militares en busca de miembros de Kamuina Nsapu, ha precisado el organismo de la ONU.

Por otra parte, la Oficina de Derechos Humanos de la ONU en el país ha recibido información de la violación de al menos dos mujeres y tres niñas por soldados durante la citada operación en Kananga. Además, las fuerzas de seguridad detuvieron a 27 personas, entre ellas diez niños y una niña de 15 años.

El Alto Comisionado también ha denunciado que el pasado 30 de marzo unos 30 presuntos milicianos de Kamuina Nsapu atacaron una parroquia en Luiza, donde maltrataron a tres monjas y un sacerdote, a los que amenazaron con matar. Finalmente, el sacerdote y una de las monjas fueron secuestrados y liberados al día siguiente, previo pago de un rescate.

Esta milicia, que toma su nombre de un líder tradicional local llamado Kamuina Nsapu muerto en una operación policial en agosto de 2016, se ha caracterizado hasta ahora por atacar principalmente a los símbolos y agentes del Estado, así como iglesias, además de reclutar a cientos de niños.

En opinión del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Raad al Hussein, "el descubrimiento de aún más fosas comunes y las informaciones de violaciones continuadas y abusos subraya el horror que ha estado registrando en los Kasais en los últimos nueve meses".

INVESTIGACIÓN DE LOS ABUSOS

En este sentido, ha considerado "absolutamente vital que el Gobierno congoleño adopte medidas significativas para garantizar que hay una investigación rápida, transparente e independiente" sobre las presuntas violaciones y abusos perpetrados por todas las partes.

Zeid ha ofrecido la ayuda de su oficina para realizar dicha "investigación creíble" y ha pedido acceso a todos los lugares donde hay fosas comunes, así como a todos los testigos, incluidos los detenidos, y la información pertinente para "determinar la responsabilidad a todos los niveles".

El máximo responsable en materia de Derechos Humanos de la ONU ha advertido de que "a falta de una investigación nacional efectiva" no dudará en "instar a la comunidad internacional que apoye una investigación por un mecanismo internacional, incluido el Tribunal Penal Internacional".

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