"Florentino tiene en la mesilla de noche las fotos de Cristiano, de Bale y de Calvo desde el 8 de septiembre", ha ironizado la edil tras criticar el acuerdo por el que Dragados conseguirá resolver el contrato llevándose 3,2 millones de euros por lucro cesante y el pago con "las mejores parcelas", donde podrá levantar dos torres de 26 plantas.
Eso le ha llevado a advertir al delegado que puede costarle caro en Podemos, partido en el que milita Calvo, porque según se desprende de la "conversación epistolar tuitera" entre Pablo Iglesias e Íñigo Errejón, el edil no conseguiría "dar miedo a ningún poderoso". "Florentino es su presidente de su club de fans", ha remachado.
Sus críticas se han extendido hasta llegar al PP, partido que promovió "lo que era una sencilla operación de remate pero que se convirtió en una pesadilla" una vez que la burbuja inmobiliaria estalló y el negocio "dejó de ser rentable para Dragados". De ahí se pasó "a la ralentización de las obras, a las excusas y a la opacidad del PP" con una "operación sencilla empantanada durante once años" con la que los vecinos han vivido como si estuvieran "en un permanente estado de guerra".
"Buena parte de los problemas vinieron por la concesión de lo público a un privado, con el Ayuntamiento como cooperador necesario", ha reprochado. Ahora Dragados "se va por la puerta grande" mientras que el Consistorio "no hace justicia", con un proyecto de urbanización "adaptado" a la concesionaria.
"Decir que es lo máximo que han podido conseguir, pues lo comprendo, pero decir que es un éxito es que me parece una burla", ha reprochado al equipo de Calvo, a quien ha afeado "un mal acuerdo".
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