PP. PSOE Y CS QUIEREN QUE UNIDOS PODEMOS ASUMA EL "HARTAZGO" POR SUS GESTOS PARLAMENTARIOS

El PP, el PSOE y Ciudadanos quieren que Unidos Podemos asuma sin lugar a dudas el "ánimo general de hartazgo" que sus formas parlamentarias están generando en una "inmensa mayoría" de la Cámara y la necesidad de que la moderación y la cortesía sigan rigiendo la actividad en el Congreso de los Diputados.
La gota que ha colmado el vaso fue el gesto del diputado Diego Cañamero el pasado miércoles, cuando se dirigió al escaño del ministro de Justicia, Rafael Catalá, exhibiendo dos carteles en los que denunciaba el diferente trato dado por los tribunales a Iñaki Urdangarin y a Andrés Bódalo.
Lo hizo antes de comenzar la sesión plenaria, por lo que no era de aplicación ninguna de las previsiones reglamentarias que habitualmente se esgrimen para preservar el buen funcionamiento de los debates en el hemiciclo.
El PP expresó su malestar a la presidenta del Congreso, Ana Pastor, y también desde el PSOE y desde Ciudadanos reconocieron la necesidad de preservar ese orden entendiendo que la actitud de Cañamero había rozado lo que se puede considerar "acoso" a un miembro de la Cámara.
Ante la imposibilidad de aplicar ninguna previsión reglamentaria a Cañamero, más allá del deber general de "respetar el orden, la cortesía y la disciplina parlamentarias", esos tres grupos barajaron la posibilidad de aprobar algún tipo de apercibimiento al diputado.
Según explicaron fuentes parlamentarias, el PP y el PSOE tenían intención de abordar el asunto de modo informal este martes en la reunión de la Mesa, pero no pudieron hacerlo por falta de tiempo y el asunto quedó pendiente para la reunión del próximo martes.
Más allá del episodio concreto de Cañamero, esos tres grupos y sus representantes en la Mesa subrayan otros comportamientos por parte de miembros de Unidos Podemos que no consideran acordes con una Cámara en la que se trabaja con la palabra y en la que es necesario encontrar siempre un equilibrio entre la libertad para defender las propias ideas y el respeto a los demás parlamentarios.
Ponen como ejemplo la intervención del secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, el pasado miércoles dirigiéndose al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, cuando le dijo que "se la bufa" el informe de los letrados sobre los vetos del Ejecutivo a proposiciones de ley de la oposición.
Citan también la exhibición de camisetas por parte de los diputados para atraer la atención de los medios de comunicación. Es algo que se ha hecho siempre en momentos puntuales, pero que a juicio de esos partidos los parlamentarios de Unidos Podemos están llevando al límite.
El pasado miércoles, coincidiendo con el Día Mundial del Agua, diputados de ese grupo exhibieron desde sus escaños camisetas reivindicativas en defensa del agua pública. Pero no solo se las pusieron, dicen desde esos otros partidos, sino que se las pasaron de unos a otros y después las colocaron en los escaños. De hecho, recuerdan, la propia presidenta tuvo que alertar a sus señorías de que el hemiciclo "no es un tendedero".
Hay un "ánimo general de hartazgo" por ese tipo de comportamientos, una inmensa mayoría a la que no le gusta "nada" lo que está ocurriendo en cada sesión, aseguran, y quieren que los diputados y dirigentes de Unidos Podemos sean conscientes de ese clima y pongan límites. No se trata de endurecer el Reglamento, precisan, porque eso no evitaría que se buscaran nuevos subterfugios, sino de preservar la moderación y el respeto en el Parlamento.