EL PSOE RECONOCE QUE SUS VOTANTES ESTÁN PRÓXIMOS IDEOLÓGICAMENTE A PODEMOS

El PSOE reconoce en la Ponencia Marco para su 39 Congreso Federal que sus votantes se encuentran ideológicamente más cerca de partidos como Podemos que de formaciones como Ciudadanos.
De este modo, la ponencia encargada por la Gestora enmienda la plana a la gestión política de Pedro Sánchez, quien apostó por un acuerdo con Ciudadanos en su intento de alcanzar la Presidencia del Gobierno.
Este texto pone negro sobre blanco el hecho de que en las elecciones generales de 2015 cosechó los “peores resultados de toda su historia” desde la restauración de la democracia, “sólo empeorados” en los comicios de junio de 2016, cuando “transfirió más del 20% de sus votantes” hacia Podemos y sus confluencias, “casi tres veces más” de lo que perdió en favor de Ciudadanos.
En ambas citas electorales, el cartel socialista tenía a su secretario general Pedro Sánchez como candidato.
“La posición actual de los votantes socialistas es más cercana a la media ideológica de los votantes de Unidos Podemos y confluencias que a la de los electores de Ciudadanos”, se puede leer en el texto aprobado este sábado para su remisión a las agrupaciones para las enmiendas.
No obstante, atendiendo a la distribución de los nuevos partidos en el ámbito territorial el documento afirma que los votantes socialistas están más cercanos al elector de Ciudadanos que al de la confluencia electoral de Izquierda Unida y Podemos.
Explica que quienes apostaron por los nuevos partidos en diciembre de 2015 estaban más preocupados por la política, la corrupción y el fraude que el resto y también menos satisfechos con la democracia.
Ante este contexto, resalta que el PSOE no supo convertirse en la alternativa al PP porque, según el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), los nuevos partidos eran los que “mejor representaban sus ideas”.
Para combatir esta desafección, defiende que las “señas programáticas” del PSOE sean “claras, constantes y consistentes” sobre la base del “cumplimiento” de los compromisos adquiridos y del mantenimiento de las señas de identidad del partido.
Por último, el texto hace referencia a que el valor del proyecto político socialista no reside en la “suma fragmentada de propuestas que varían en función de su mayor o menor novedad” ni “mucho menos” en caminar a rebufo de otras formaciones políticas”.
Aboga por definir la “singularidad de nuestra oferta política” en un “entorno de integración económica que modifica el margen de maniobra de los gobiernos nacionales”.
Ello debe hacerlo “combatiendo las propuestas populistas, proteccionistas y xenófobas que encuentran eco en una parte de la ciudadanía europea y que no conducen a nada más que a la autarquía, el aislamiento y el empobrecimiento de nuestra sociedad”.