De cara a los comicios, el Gobierno congoleño ordenó las dos principales proveedoras del país que bloqueen todas las comunicaciones, incluyendo los teléfonos, los mensajes de texto e Internet. Asimismo, prohibió el uso de vehículos a motor durante la votación, exceptuando a aquellos que tuvieran permisos especiales.
En respuesta, la oposición condenó el bloqueo a las comunicaciones, asegurando que impediría a los observadores electorales hacer y trabajo y advirtiendo de la posibilidad de que se produjera un fraude electoral.
"El pueblo congoleño ha participado en las elecciones presidenciales, y la votación fue generalmente pacífica a pesar del corte de las comunicaciones y los defectos en la organización de la votación", ha indicado la UE en un comunicado.
"En esta etapa, es importante que el proceso de recuento y tabulación de votos tenga lugar de forma ordenada, transparente y verificable", ha agregado, animando a todos los actores políticos "a recurrir a las vías legales para resolver sus diferencias".
Por su parte, el viceportavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, John Kirby, ha felicitado al pueblo congoleño por su "participación activa" en las elecciones, "a pesar de los muchos impedimentos" a los que han hecho frente.
"Se han presentado numerosos informes sobre irregularidades que han provocado dudas sobre la credibilidad del proceso, incluido el bloqueo a los medios durante la votación, un ambiente informativo desigual y restrictivo y una disparidad en el acceso a los recursos estatales", ha lamentado.
En este sentido, Kirby ha apuntado además a "un corto periodo de tiempo para los preparativos electorales" y a "restricciones de la libertad de expresión, asociación y comunicación" durante la campaña electoral.
Por último, ha pedido al pueblo congoleño "que muestre paciente y evite las especulaciones", reclamando a los líderes políticos "que renuncien a la violencia, pidan a sus seguidores que permanezcan en calma, y resuelvan sus diferencias de forma pacífica".
EL PRESIDENTE, PRINCIPAL FAVORITO
El presidente, Denis Sassou Nguesso, parte como máximo favorito para ganar las elecciones y ampliar su longevo mandato en el país africano, que ha liderado durante 32 de los últimos 37 años gracias a una serie de ardides con los que ha superado bloqueos constitucionales.
El pasado mes de octubre, sin ir más lejos, Sassou Nguesso eliminó el límite de mandatos y el límite de edad para presentar su candidatura, lo que habría impedido que compareciera de nuevo a los comicios.
Ocho contrincantes del presidente comparecen a los comicios, entre ellos el popular general Jean-Marie Mokoko, ex asesor de seguridad del presidente. Todos ellos han prometido apoyar al candidato de oposición que consiga pasar a una hipotética segunda vuelta.
Los críticos del presidente Sassou Nguesso prácticamente dan por sentado el fraude en los comicios porque están convencidos que los leales al presidente en la Comisión Electoral acabarán falseando los resultados.
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