El Departamento del Tesoro norteamericano ha informado de los castigos contra Sohrab Soleimani y la Organización de Prisiones de Teherán --de la que Soleimani fue responsable-- por los "graves abusos de los Derechos Humanos" que se cometen contra "presos políticos" en la cárcel de Evin.
Quienes han logrado salir denuncian "duros interrogatorios, confesiones forzadas, torturas físicas y psicológicas y falta de acceso a la atención médica", según el Gobierno norteamericano, que ha reprobado de forma particular una carga perpetrada en abril de 2014 que se saldó con decenas de heridos.
El portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, ha explicado en rueda de prensa que estas sanciones llegan en un momento en el que Irán sigue deteniendo "injustamente" a ciudadanos extranjeros, entre ellos varios con nacionalidad estadounidense.
Qassem Soleimani, líder de la Fuerza Quds, ya figura en la 'lista negra' de Estados Unidos. La adopción de sanciones implica la congelación de los activos que puedan tener bajo soberanía norteamericana y limitan cualquier tipo de contacto con las personas o entidades señaladas.
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