Bagdad, 18 ene.- El líder del bloque iraquí Al Iraqiya, Ayad Alaui, cuya alianza ganó los últimos comicios, propuso hoy el nombramiento de un nuevo primer ministro para resolver la crisis política en el país si fracasa la conferencia nacional prevista.
En una rueda de prensa, el exprimer ministro iraquí indicó que su bloque ofreció tres opciones a las fuerzas políticas en caso de que fracase la conferencia nacional que el presidente iraquí, Yalal Talabani, tiene previsto convocar para limar diferencias entre los distintos grupos.
La primera alternativa -apuntó Alaui- sería la formación de un nuevo Gobierno que cree las condiciones adecuadas para celebrar elecciones que lleven a la constitución del Parlamento y del Ejecutivo.
El líder iraquí también apoyó que la coalición política que gobierna actualmente el país nombre un nuevo primer ministro en sustitución de Nuri al Maliki, que ocupa actualmente el cargo.
Alaui destacó que la tercera posibilidad sería crear un nuevo Ejecutivo de unidad nacional que actúe de acuerdo a la Constitución y a los acuerdos de Erbil, capital del Kurdistán iraquí donde las fuerzas políticas pusieron fin al vacío gubernamental fruto de sus continuas desavenencias y permitieron la formación de un gabinete a fines de 2010.
"El Gobierno actual está intentando desviar la atención sobre sus fracasos mediante la creación de crisis y discordias", subrayó Alaui, que citó un reciente informe de la organización Transparencia Internacional que califica a Irak como uno de los países más corruptos debido a la política de exclusión, la marginación o la politización del poder judicial.
"Apoyamos firmemente al congreso nacional convocado por el presidente, pero al mismo tiempo no estamos listo para asistir a reuniones sin valor", remató el exprimer ministro.
La actual crisis en Irak se desencadenó el pasado día 19 de diciembre por la emisión de una orden de arresto contra el miembro de Al Iraqiya y vicepresidente suní, Tareq al Hashemi, por supuestos delitos de terrorismo, lo que originó el boicot de su grupo a las reuniones del Gobierno de unidad nacional, donde tiene ocho ministros.
Precisamente hoy, esta coalición de tendencia laica que agrupa a dirigentes suníes y chiíes criticó la reciente decisión del Gobierno de Al Maliki de prohibir a los ministros de este bloque ejercer su trabajo en sus departamentos después de que estos decidieran ausentarse de las mencionadas reuniones.
El Ejecutivo fue constituido el 21 de diciembre de 2010 tras más de nueve meses de vacío gubernamental causado por las discrepancias entre las distintas fuerzas, a raíz de los ajustados resultados de las elecciones parlamentarias de marzo de ese año.
La alianza ganadora fue Al Iraqiya, que con 91 de los 325 escaños del Parlamento no tuvo escaños suficientes para formar Gobierno.
Las principales contrincantes de Al Iraqiya fueron el bloque Estado de Derecho, de Al Maliki, que quedó segundo, y la Alianza Nacional Iraquí, del exprimer ministro Ibrahim al Yafari, que forjaron un acuerdo para formar la chií Alianza Nacional, que sumó 159 asientos en la Asamblea.
Junto a la tensión política, Irak vive una crisis de seguridad que se ha exacerbado tras la retirada de las tropas estadounidenses el pasado diciembre y agudizado por una serie de sangrientos atentados.
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