Roma, 14 jun.- Los ministros de Trabajo y Economía de Alemania, Francia, España e Italia coincidieron hoy en subrayar la necesidad de que el Banco Europeo de Inversiones (BEI) conceda "crédito a las pequeñas y medianas empresas (Pymes)".
Ésta fue una de las conclusiones de la reunión que mantuvieron en Roma los titulares de esos departamentos de las cuatro primeras economías de la zona euro, en la que se puso de relieve la importancia de reactivar el flujo de financiación a las pequeñas y medianas empresas.
Para ello, se barajaron diferentes instrumentos y se alcanzó un consenso en torno a nuevos canales de financiación, como la posibilidad de que las pymes puedan emitir "mini-bonos", consistentes en "obligaciones con características especiales garantizadas por el Estado, o el uso de los recursos del Banco Europeo de Inversiones (BEI)".
Los encargados de dar a conocer los temas discutidos durante el encuentro celebrado en Roma fueron los ministros italianos de Economía, Fabrizio Saccomanni, y de Trabajo, Enrico Giovannini, en una comparecencia ante la prensa junto a sus colegas.
Saccomani explicó que el objetivo es que el BEI, "que ha registrado un aumento de capital de 10.000 millones de euros, utilice de forma innovadora esos fondos, multiplicando esa base de capital hasta los 60.000 millones de euros para financiar a las pequeñas y medianas empresas, la innovación, la inversión, y que tenga el fin de reforzar el empleo".
Giovannini, por su parte, ilustró los aspectos abordados durante el encuentro referentes al empleo y explicó que entre los temas puestos sobre la mesa estuvieron la necesidad de cooperación en los ámbitos de formación y los servicios de empleo, ya sea en una "óptica tanto nacional como supranacional".
Aseguró que es necesario concentrar "lo antes posible, respetando los vínculos financieros", los recursos de 6.000 millones de euros del fondo para el empleo juvenil, para combatir este problema.
Destacó, además, la importancia de mejorar el intercambio de información y de experiencias entre los países en lo que se refiere a los servicios de empleo y manifestó que en la reunión se trató la idea del "Erasmus para todos", es decir ampliar la cobertura de esas becas a otros sectores estudiantiles.
Subrayó también que para lograr creación de empleo es necesaria "una mejora" de la asociación "entre lo público y lo privado, ya que un compromiso tan fuerte no puede ser realizado únicamente por el sector público".
Los ministros españoles de Economía, Luis De Guindos, y de Empleo, Fátima Báñez, explicaron después a la prensa que las propuestas de España para las próximas cumbres europeas defienden e la necesidad de desbloquear créditos para luchar contra el desempleo juvenil y que estas inversiones no computen en el déficit público.
Báñez insistió en que en las próximas reuniones europeas es también necesario que "el aprobado Plan europeo de iniciativa juvenil con un valor de 6.000 millones se desbloquee cuanto antes y se concentre en los primeros años".
Este plan está previsto que se ponga en marcha a partir de 2014 y dure siete años, pero España y el resto de países reunidos hoy insistirán para que estas ayudas se concentren en los primeros dos años, "pues es ahora cuando se necesitan", añadió Báñez.
La ministra de Empleo recordó que a España le corresponden cerca 960 millones y que los sumaría "a los fondos ya destinados al llamado Mecanismo la Estrategia de Emprendimiento y Empleo joven, que ya está en marcha al 38 %".
Otra de las propuestas que España puso hoy en esta "reunión informal" sobre empleo es la que defiende que "las ayudas al empleo joven no cuenten como déficit porque son una inversión y por tanto tienen que ser consideradas diferentes", explicó De Guindos.
Sobre el papel del Banco Europeo de Inversiones, el ministro de Economía afirmó que "es un instrumento muy poderoso que tiene la UE" y añadió que es necesario que se active en estos momentos "en los que existe una situación de rescisión crediticia y de costes financieros diferentes para cada país".
En la cita de hoy participaron además de los ministros italianos y españoles, los responsables de Trabajo, Empleo y Diálogo Social de Francia, Michel Sapin, y el titular de Finanzas, Pierre Moscovici, y por Alemania la responsable de Trabajo y Asuntos Sociales, Ursula Von der Layen, y su colega de Finanzas, Wolfgang Schäuble. EFE
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