(ampliación) gobierno. Sáenz de santamaría promete ejercer sus cargos “con diálogo y moderación”


La nueva vicepresidenta del Gobierno, ministra de la Presidencia y portavoz, Soraya Sáenz de Santamaría, prometió este jueves ejercer sus nuevas responsabilidades “con diálogo y moderación”, además de “con esfuerzo, tesón y humildad”, para ayudar a sacar a España de la actual crisis económica.
Sáenz de Santamaría hizo estas declaraciones durante la toma de posesión como ministra de la Presidencia en el Palacio de La Moncloa, en un acto en el que el socialista Ramón Jáuregui le cedió la cartera en presencia del nuevo presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
En una breve intervención, Sáenz de Santamaría reconoció que llega al Ejecutivo “en un momento de enorme responsabilidad, una responsabilidad histórica para el país”, por lo que piensa dar lo mejor de sí misma, al ser consciente de que de su gestión y la de sus compañeros “depende el bienestar de muchos y en nuestra mano está mejorar su calidad de vida”.
Explicó que regresa al Ministerio de la Presidencia, adonde llegó hace once años para trabajar como asesora jurídica de Rajoy, "con sentido del deber, con sentido común y cierto sentido de la deportividad", tres consejos que siempre le ha dado su jefe en cada uno de los puestos que ha ocupado.
Recalcó que "estos tiempos exigen diálogo y moderación". "Diálogo con todas las fuerzas políticas, porque uno puede tener siempre algo de razón pero todos pueden tener sus razones y hay que escucharlas, porque del contraste de razones siempre llegan las mejores soluciones", dijo.
También garantizó "un diálogo con la ciudadanía desde la sinceridad y desde el realismo" de la situación del país, dado que a ella le corresponde, como portavoz del Gobierno, "trasladar un diagnóstico sincero de cómo está la situación".
Sáenz de Santamaría aseveró que cada ministro tendrá una tarea diferente frente al problema económico: "Unos para paliarlo y otros para mejorar la confianza, otros para generarla y otros muchos para que mientras se crea ningún español quede desprotegido".
Asimismo, garantizó que los empleados de La Moncloa, a muchos de los cuales conoce porque formó parte de ellos, trabajarán "en el mejor de los ambientes y con la mejor de las disposiciones" por parte del nuevo Ejecutivo.
Recordó que hace 11 años llegó a este mismo ministerio "con mucha ilusión y muchas ganas" para trabajar a las órdenes del entonces ministro de la Presidencia, Mariano Rajoy, y ahora regresa "con la misma ilusión, con muchas más ganas y mucha más humildad" para desempeñar su papel de la mejor forma posible.
LOS TIEMPOS DE JÁUREGUI
Por su parte, el ministro de la Presidencia saliente, Ramón Jáuregui, dio la "bienvenida" a Sáenz de Santamaría, a la que advirtió de que asume el cargo "en tiempos muy difíciles y en los que hay que decir 'no' muchas veces, muchas veces más que decir que 'sí'".
Jáuregui señaló que en estos momentos de crisis económica los márgenes para tomar decisiones "son muy estrechos" y casi siempre hay que elegir "entre lo malo y lo peor, no entre lo bueno y lo malo".
Por eso, subrayó que es un tiempo "para las políticas grandes" y le deseó la mejor suerte a Sáenz de Santamaría en su tarea, "porque vuestro éxito será el de toda España".
La toma de posesión de Soraya Sáenz de Santamaría contó con la presencia del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y otros compañeros de gabinete, como José Manuel Soria (Industria), Ana Pastor (Fomento), Jorge Fernández Díaz (Interior), José Manuel García-Margallo (Exteriores) y Fátima Báñez (Empleo).
Asimismo, asistieron el presidente del Senado, Pío García-Escudero; el presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera; la vicepresidenta primera del Congreso, Celia Villalobos; el vicepresidente primero del Senado, Juan Ramón Lucas, y el futuro secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón, mano derecha de Sáenz de Santamaría y cuyo nombramiento aprobará este viernes el Consejo de Ministros.

Mostrar comentarios