(ampliación) merkel asegura que españa va “por muy buen camino” con las reformas de zapatero

La canciller de Alemania, Angela Merkel, lanzó esta tarde un mensaje de confianza en la economía española al asegurar que las reformas emprendidas por el Gobierno de Zapatero van “por muy buen camino” y serán “aprobadas” por los mercados.
Merkel y el presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, comparecieron en rueda de prensa conjunta en el Palacio de La Moncloa tras la cumbre entre ambos países en la que participaron seis ministros de cada gobierno y que concluyó con un almuerzo en el que estuvieron también representantes de los empresarios y los sindicatos de España y de Alemania.
“España ha hecho sus deberes y por eso creo que va por muy buen camino”, aseguró Merkel, en respuesta a la pregunta de si descarta un plan de rescate como el que antes se aprobó para Grecia e Irlanda.
“No cabe hacer ningún tipo de especulación” sobre ese asunto, aseguró, convencida además de que los mercados tomarán “buena nota” del rumbo trazado por España, “aprobándolo”, y de que el presidente causará “muy buena impresión” cuando desgrane esas medidas ante la Unión Europea.
Merkel juzgó además “muy positivo” y “muy tranquilizador” que esas reformas se hayan acordado “sin conflicto” con los sindicatos, y aseguró que el respaldo de las organizaciones sociales “crea mucha confianza en el futuro”.
Nada más tomar la palabra, Merkel quiso dejar claro que el la delegación alemana estaba en España “como amigos” para respaldar “importantes reformas” que la han encauzado en un rumbo “mucho más positivo”.
Esas reformas, precisó, no obedecen sólo a una determinada orientación política sino que eran necesarias “desde un punto de vista objetivo” como lo son en toda Europa para fortalecer la competitividad como única vía para garantizar el bienestar de los ciudadanos europeos en el futuro.
MÁS REFORMAS
Ni Merkel habló de nuevas imposiciones para España ni Rodríguez Zapatero reconoció esa posibilidad. De hecho, el presidente español encuadró en la negociación colectiva, que compete a empresarios y sindicatos y de cuya reforma ya se han puesto las bases, establecer a qué se vincula la evolución los salarios.
Sobre la estabilidad presupuestaria, el presidente subrayó que ya existe una normativa estatal y es “bueno que se traslade” a las comunidades autónomas, en la línea de lo que ya ha comprometido el PSOE, que es aprobar por ley en los territorios que gobierne el techo de gasto para cada ejercicio.
Reiteró, en ese sentido, que España siempre ha sido un defensor “y buen cumplidor” del pacto de estabilidad europeo, que ahora se pretende reforzar, y de hecho es el país “que menos veces lo ha incumplido”.
El refuerzo de ese pacto es uno de los retos que afronta la Unión Europea ante el Consejo de marzo y del que se pondrán las bases este viernes en Bruselas.
Para Rodríguez Zapatero, es “de sentido común” que quienes comparten una moneda única tengan también criterios comunes en las variables que marcan la productividad y, por ello, que se avance “en la armonización” de impuestos como el de Sociedades.
Hace falta “más coordinación”, decía Merkel, y avanzar en la línea de lo que se ha conseguido, por ejemplo, con el IVA, caminando hacia una política común en los factores que inciden en la competitividad que debe lograr la Unión Europea.
CONFIANZA
Los dos mandatarios lanzaron un mensaje de confianza en el euro y de compromiso con la moneda única, porque “si fracasa el euro fracasa Europa”, en palabras de Merkel.
“Cada uno tiene que hacer los deberes en casa”, advirtió la canciller, porque la fórmula no pasa sólo por la solidaridad, sino por aumentar los potenciales de productividad y competitividad de cada cual.
Rodríguez Zapatero insistió en la idea de que Europa ha sido durante décadas el espacio económico más competitivo y con mayor bienestar, “y no vamos a renunciar” a que siga estando a la cabeza de esa misma combinación.
La Unión Europea “genera beneficios y comporta responsabilidades”, dijo el presidente, y por ello reiteró ante Merkel que España “es un país de compromisos, de responsabilidades, de cumplimiento de los deberes”, como lo demuestran las reformas emprendidas.
Para España, concluyó Rodríguez Zapatero, esta cumbre bilateral supone “confianza, credibilidad” y da un mensaje “de fuerza en nosotros mismos”, en lo que todos los europeos pueden hacer juntos para superar la crisis económica, “de manera solidaria y cada uno asumiendo nuestras responsabilidades”.