Movimiento de calado en la investigación a José Manuel Villarejo. La Fiscalía Anticorrupción ha decidido reforzar el equipo que indaga una de las causas más complejas de la democracia y lo ha hecho incorporando dos fiscales más. Se trata de Jorge Andújar y Alejandro Cabaleiro, los cuáles se sumarán al equipo formado por Miguel Serrano y César de Rivas, fiscal este último que aterrizó hace apenas una semana en la causa tras la salida de Ignacio Stampa. De este modo, el Ministerio Público consolida su equipo en un momento crucial de esta causa que acaba de cumplir tres años de instrucción en la Audiencia Nacional.
Las nuevas asignaciones llevadas a cabo en el órgano que dirige Alejandro Luzón pretenden evitar que la causa se ralentice con la instrucción de los nuevos juicios. El avance de las pesquisas ha permitido dejar a un paso del juicio un total de cinco de la treintena de piezas que integran el procedimiento Tándem. Se trata de las relativas a la investigación al despacho de Abogados Herrero y Asociados (Iron), la que salpica a una parte de la familia de los García Cereceda (Land), la relativa a los hermanos Muñoz Tamara (Pintor), la pieza Dina sobre el robo del teléfono de la exasesora de Pablo Iglesias, y la que se cerró esta misma semana y que implica al que fuera comisario jefe de Barajas, Carlos Salamanca.
El objetivo de los investigadores es juzgar estas piezas lo antes posible teniendo en cuenta que el próximo mes de noviembre se cumple el máximo legal de tiempo que Villarejo puede estar en prisión provisional. Alcanzados estos cuatro años y de no haber condena por ninguna de las líneas de investigación sobre sus encargos de espionaje, el comisario jubilado tendría que quedar en libertad, supuesto que los investigadores pretenden evitar. Por ese motivo la designación de dos fiscales más tiene como fin que las nuevas fases de juicio oral no interrumpan las diligencias de investigación todavía abierta en las principales piezas del procedimiento. Entre ellas se encuentran las relativas a los encargos de Caixa, Iberdrola, BBVA o el espionaje ilegal a Luis Bárcenas.
Los cambios en la Fiscalía Anticorrupción se producen tras la marcha del fiscal Ignacio Stampa al no lograr plaza fija en este órgano y terminársele la comisión de servicios en la que se encontraba. Stampa fue el fiscal que comenzó investigando esta causa junto con Miguel Serrano. Ambos fueron los encargados de impulsar un caso que partió desde una denuncia por permitir la entrada ilegal de ciudadanos guineanos en España y que se ha convertido en uno de los procedimientos más vastos y complicados que se siguen en la Audiencia Nacional. Alejandro Luzón anunció en un encuentro informal con periodistas el pasado viernes que el reemplazo de Stampa sería César de Rivas. Fuentes de la fiscalía consultadas por La Información explican que se trata de un fiscal con un perfil técnico y discreto.
En apenas unas semanas Rivas ya se ha puesto al frente de la investigación junto con Serrano. De hecho, dirigió una declaración judicial que se celebró este mismo miércoles de en el marco de la pieza por los encargos del BBVA al entramado de Villarejo, según ha podido saber este diario. Luzón ya adelantó la pasada semana que no descartaba ampliar el equipo de fiscales a tenor de lo complicado del asunto. De este modo se incorporan ahora el fiscal Jorge Andújar Alejandro Cabaleiro. Este último recabó en Anticorrupción en el año 2018 procedente de la Fiscalía del Principado de Asturias y ha estado al frente de causas como la dirigida contra la excúpula de Banco de Valencia. Igualmente Luzón le designó como refuerzo a las dos fiscales del caso Púnica ante la proximidad del fin de la instrucción.
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