En clave nacional: Rivera se refuerza, Iceta salva al PSOE, debacle de PP y Podemos

    • Los líderes nacionales desembarcaron en Cataluña como paso previo a unas generales en las que los cuatro partidos se juegan mucho
    • Ciudadanos suma más votos que PP y Podemos juntos. El PSC de Iceta mantiene el tipo y supera a Podemos.
27S.- Rivera llama a una participación masiva
27S.- Rivera llama a una participación masiva

Estas elecciones se van a leer en clave nacional, es inevitable. Cataluña es un granero de votos considerable en el que en las elecciones generales hay muchos escaños en juego, en concreto 47. Esta comunidad ha sido clave en las victorias socialistas de los últimos años, sobre todo para Rodríguez Zapatero. Así pues el resultado, aunque no es extrapolable para unas generales, si marca tendencias.

Y los catalanes han hablado claro, no quieren ni el inmovilismo de Rajoy ni los experimentos de Pablo Iglesias. Apuestan claramente por una tercera vía de Ciudadanos y el PSOE, aunque con marcadas diferencias entre ambas. Tanto Rivera como Sánchez apuestan por una reforma Constitucional. Parece que esa solución gusta, aunque no tanto como el soberanismo.

Los datos, aunque con matices, dicen que Ciudadanos ha sacado un muy buen resultado que refuerza a Albert Rivera. Más de 700.000 votos en estas autonómicas que pueden ser más en unas generales. Inés Arrimadas ha casi triplicado el número de votos y de escaños, de nueve a 25. Es más, Ciudadanos tiene más votos que Podemos y PP juntos. (700.000 frente a 350.000 de CSQSP y 320.000 del PP). Además, es con claridad, mucha más de la que decían los sondeos, la primera fuerza constitucionalista. Saca más de 200.000 votos al PSC, que es tercero, y seis puntos (18% frente al 12).

El PSC por su parte ha obtenido el peor resultado de su historia, en escaños (ha perdido cuatro, aunque en votos ha logrado acercarse al de Pere Navarro de hace tres años. Sin embargo, en Ferraz se respiraba moderado optimismo. Es como si Miquel Iceta hubiera salvado la campaña del propio Pedro Sánchez. Por varios motivos. La diferencia en votos con Podemos es de 160.000 votos a favor de los socialistas. Algo impensable hace unos meses y mucho menos hace unas semanas cuando el PSC rivalizaba con ganar o no al PP. El PSC ha movilizado a ese cinturón rojo, aunque ahora es naranja, y ha logrado superar en 200.000 votos al PP en Cataluña.

"Resultado es altamente decepcionante para nosotros. Nos vamos a esforzar para ganar las Generales.", ha dicho Pablo iglesias. El candidato de Podemos ha reconocido abiertamente el mal resultado de Catalunya Si que es Pot, que ha obtenido 11 escaños frente a los 13 que logró ICV por separado. Es después de las andaluzas y de las autonómicas el primer gran batacazo de Podemos, que tan solo supera al PP en cuanto a partidos constitucionalistas. Podemos e Iglesias deberían tomar nota de su postura ambigüa en torno a los nacionalismos y sus pactos con nacionalistas en todo el Estado español.

Esto supone un frenazo a las aspiraciones de Iglesias, que cada vez ve más lejos, superar al PSOE como fuerza hegemónica de la izquierda. Y también, como no, es un fracaso rotundo de Rajoy y del PP catalán. El candidato, Xavier García Albiol, ha logrado 11 escaños, ocho menos de los 19 de Sánchez Camacho, y el tercer peor resultado de toda la historia del partido en la Comunidad. No obtenía tan pocos escaños desde 1992.

Rajoy, por su parte debería tomar nota de su posición frente a Cataluña. Ese inmovilismo no se entiende en Cataluña, y en el resto de España cada vez son más los que opinan que el Estado debería moverse algo, escuchar a los catalanes, y al menos realizar una propuesta para renovar el pacto con los ciudadanos de Cataluña.

Quedan algo menos de tres meses para las elecciones. El sprint final para la Moncloa. Rajoy sigue primero en las encuestas, Sánchez le sigue de lejos aunque ha podido coger impulso en la noche de hoy. Albert Rivera coge aire y con el efecto rebote de estas elecciones podría subir como la espuma. Pablo Iglesias, el tercero en la rampa de salida, debe reflexionar. Como Rajoy. Iglesias al menos ha dado la cara y ha reconocido la derrota. Rajoy ha mandado a Pablo Casado a que se coma el marrón.

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