El abogado de Sócrates cree indecente que su cliente no esté en libertad

Lisboa, 24 dic.- El abogado del ex primer ministro José Sócrates censuró hoy la actuación de la Justicia en el caso que envuelve a su cliente y calificó de "indecencia" que se encuentre en prisión desde hace prácticamente un mes.

Así lo señaló el letrado Joao Araújo después de visitar a Sócrates en el centro penitenciario de Évora -a unos 120 kilómetros de Lisboa-, donde está recluido desde el pasado 25 de noviembre debido a su presunta implicación en un caso de corrupción, fraude fiscal y blanqueo de capitales.

Interrogado sobre la decisión del juez de excarcelar al chófer del ex primer ministro -también imputado en esta misma operación- y colocarlo en arresto domiciliario, el abogado se mostró indignado.

"Joao Perna -el conductor de Sócrates- no está en libertad mientras tenga restricciones. Es una verdadera y perfecta indecencia porque todos deberían estar en libertad", aseveró el letrado.

Araújo aseguró que Sócrates se encuentra "bien" pese al tiempo que ya lleva en prisión y reveló que su defendido ya era más pesimista que él sobre sus opciones de salir de la prisión en el plazo más breve posible.

"La libertad es una cosa demasiado seria para retirarla así como así", lamentó el abogado.

Tras la excarcelación del chófer, de los cuatro imputados en la llamada "Operación Marqués" sólo quedan dos en prisión: el propio Sócrates y el empresario Carlos Santos Silva, amigo personal del que fuera jefe de Gobierno de Portugal entre 2005 y 2011.

Araújo ya presentó un recurso para obtener la liberación de su cliente, aunque continúa a la espera de que sea evaluado por el juez que instruye el caso.

Sócrates, antiguo secretario general del Partido Socialista luso (PS), está acusado de participar en "operaciones bancarias, movimientos y transferencias de dinero sin justificación".

Filtraciones a medios lusos apuntan a que el antiguo dirigente socialista cuenta con una fortuna superior a los 20 millones de euros, dinero que guardaba supuestamente en cuentas bancarias a nombre de un testaferro.

Sócrates, de 57 años, ya defendió su inocencia a través de varias cartas, en una de las cuales calificó las acusaciones de "absurdas, injustas y sin fundamentos".