El CNI homenajea a sus "héroes de Irak" a 10 años del asesinato de 8 agentes

Madrid, 29 nov.- El Centro Nacional de Inteligencia (CNI) ha rendido hoy homenaje a sus ocho agentes asesinados en la guerra de Irak al cumplirse el décimo aniversario del atentado más sangriento sufrido por los servicios secretos españoles en el exterior.

Compañeros y responsables del CNI, encabezados por el director, Félix Sanz Roldán, han participado en un acto celebrado en la sede del Centro para recordar y honrar la memoria de los agentes muertos en Irak en 2003.

Ha asistido también el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón, en representación de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que presidía la reunión del Consejo de Ministros.

Hoy se cumplen diez años del atentado contra los dos vehículos en los que se desplazaban los agentes secretos españoles a la altura de la localidad de Lutaifiya, a 30 kilómetros de Bagdad. Siete agentes resultaron muertos y otro herido leve.

Días antes, el 9 de octubre 2003, fue asesinado en la puerta de su propio domicilio, en el barrio bagdadí de Al Mansur, el sargento primero del Ejército del Aire, José Antonio Bernal, agregado del CNI en la Embajada española en Bagdad.

El acto de homenaje se ha desarrollado ante el monumento levantado en sus propias instalaciones, cuyo salón de actos lleva el nombre "héroes de Irak".

Ante el monumento ha sido colocada una corona de laurel, han informado a Efe fuentes del CNI, que recuerdan que los fallecidos son también recordados cada año por estas fechas en el Centro y en el Día de las Víctimas del Terrorismo.

Los siete agentes fallecidos fueron los comandantes de Tierra Alberto Martínez González, máximo responsable del CNI en Irak, Carlos Baró Ollero, José Merino Olivera y José Carlos Rodríguez Pérez; los brigadas de Tierra José Lucas Egea y Alfonso Vega Calvo, y el sargento primero del Aire Luis Ignacio Zanón Tazarona.

Los agentes, que resistieron media hora el ataque con granadas y fusiles, cumplían una misión de reconocimiento previa al relevo de cuatro de ellos, que iban a regresar a España próximamente.