El futuro político de España, en manos del Comité Federal del PSOE

En manos del Comité Federal del PSOE. Esa es la situación actual de España. Ante la negativa a Rajoy de intentar formar gobierno por la falta de alternativas y el ofrecimiento de Podemos a apoyar a Sánchez a cambio de la vicepresidencia, es la dirección socialista la que debe dar el visto bueno a su líder para aceptar o no un pacto que marcará el futuro político de España.

Así lo ha señalado el vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Casado, que ha reconocido que su formación está a la espera de que el Comité Federal del PSOE frene un pacto de Pedro Sánchez con Podemos, ya que, según ha dicho, el "descontento" que hay en las filas socialistas por ese posible pacto es "notorio y notable".

De esta manera, ha recalcado que José Luis Rodríguez Zapatero, Felipe González o Alfredo Pérez Rubalcaba "no están muy conformes con la deriva" a la que el actual secretario general del PSOE pretende llevar al partido.

Ferraz tampoco mira con buenos ojos al Comité Federal. Por el contrario, maniobra estos días para que el comité del sábado quede anulado y se aplace unos días. La cita se prevé más que encendida.La unidad de España: línea roja del Comité Federal

La oferta de Podemos ha provocado un terremoto en el PSOE: "chantaje inaceptable", "humillación", fueron los calificativos que más han corrido este fin de semana entre los dirigentes socialistas. Todos se oponen a abrir la puerta a cualquier acuerdo, y se lo han hecho saber sin ambages a Sánchez. No son pocos los que consideran que el secretario general debería haber tenido una posición más rotunda de rechazo a la oferta.

El orden del día de ese comité está eclipsado por un único punto: la política de negociaciones. Los asuntos se agolpan. No es sólo Podemos, también la cesión de senadores a los independentistas. Que ERC y DiL se abstengan en la investidura desagrada profundamente a la inmensa mayoría. También los guiños del PNV, partido que no se ha negado a darles sus seis escaños y que el jueves habló de la aprobación de un nuevo estatus político para el País Vasco "basado en el derecho a decidir" como condición, que no línea roja, para el diálogo.

El Comité Federal del pasado diciembre ya dejó claro a Sánchez que para ellos, esa línea roja era el rechazo frente a cualquier planteamiento que "conduzca a romper con nuestro ordenamiento constitucional y que amenace así la convivencia lograda por los españoles".

Los barones recordaron ya entonces que la autodeterminación, el separatismo y las consultas "son innegociables para el PSOE y la renuncia a esos planteamientos una condición indispensable para que se inicie un diálogo con el resto de formaciones políticas".

Aquellas advertencias cayeron, en cambio, en saco roto, por lo que los dirigentes autonómicos tratan de reservarse algún mecanismo para forzar a Sánchez a cumplir con lo acordado.El descontento entre los socialistas es notorio para el PP

Por su parte, Pablo Casado al ser preguntado en qué confía el PP para que Rajoy consiga los apoyos para ser investido, Casado ha destacado que "al final las voces críticas del PSOE pueden ser la punta de un iceberg y, como en un iceberg, lo que sobresale es mucho mucho menor que lo que hay debajo del agua. Parece ser que el descontento en las filas socialistas es notorio y notable", ha enfatizado.

En este sentido, el dirigente del PP ha subrayado que, dado que los socialistas "alardean de democracia interna", esperan que destacados dirigentes del PSOE que forman parte de ese comité aprovechen esa reunión para pronunciarse y dejar claro que no están "de acuerdo" con "la estrategia" de Pedro Sánchez."El Facebook de Rubalcaba echaba humo"

En concreto, Casado ha señalado que el pasado viernes, tras la oferta de coalición de izquierdas que lanzó Pablo Iglesias, el "Facebook de Rubalcaba echaba humo". También ha recalcado que José Luis Rodríguez Zapatero, Felipe González o Eduardo Madina "no están muy conformes con la deriva" a la que el actual secretario general del PSOE está abocando al partido.

Casado ha subrayado que si prospera ese acuerdo de Gobierno entre PSOE y Podemos será "un fraude" y seguiría los pasos de Grecia, donde también "prometían asaltar los cielos" y al final lo que se ha asaltado, ha dicho, han sido "los ahorros" de los jubilados que han "vuelto" a sufrir recortes en sus pensiones. "Esa investidura sería suicida para el PSOE y para España. El Partido Socialista lo fundó Pablo Iglesias y podría finiquitarlo otro Pablo Iglesias", ha manifestado.

Además, ha criticado la "arrogancia con las carteras" que mostró el pasado viernes Pablo Iglesias porque, "lejos de ocuparse de la política social", no pidió para Podemos el Ministerio de Sanidad, Asuntos Sociales o Vivienda, sino los del "aparato del Estado" como los que llevan el "CNI y la televisión publica" y los relativos a Interior, Defensa y Justicia. "Y curiosamente sin hacer ninguna asamblea previa, de espaldas a la democracia participativa", ha ironizado.Destaca la responsabilidad de Rivera

Tras apoyar la decisión de Rajoy de no someterse en este momento al debate de investidura porque habría sido un "sainete", el dirigente del PP ha vuelto a tender la mano al diálogo y ha dicho que es el momento de hablar "en beneficio de los ciudadanos y no de intereses personalistas" para "salvar la situación personal".

Así, ha dicho que Sánchez tiene que decirles ahora si "va a montar el avión de Maduro con los proetarras, los de la CUP y de Podemos" o si lo que quiere es "volver a la centralidad, a la socialdemocracia y a dialogar" con el Partido Popular y Ciudadanos sobre las cuestiones que interesan a los ciudadanos.

En este punto, Casado ha elogiado la postura "responsable y constructiva" del presidente de Ciudadanos, Albert Rivera. De hecho, ha recordado los pactos a los que han llegado el PP y la formación naranja en Murcia, Madrid, Castilla y León o La Rioja, hablando "siempre" de los temas que interesan a la gente.

En cuanto a si Mariano Rajoy tiene una hoja de ruta para negociar y conseguir el apoyo del PSOE y Ciudadanos, el responsable de Comunicación ha dicho desconocer la agenda del presidente del Gobierno en funciones pero ha recordado que Sánchez dijo que iba a iniciar contactos con los partidos. A su entender, "habrá que ver si en esa ronda incluye al PP" o les deja fuera en "un nuevo pacto de Tinell o cordones sanitarios."

Ante la posibilidad de que se adelanten las elecciones, el dirigente del PP ha desechado esa opción --"no porque al PP le fuera mal", según las encuestas que se están publicando-- sino porque su formación no hace "cálculos cortoplacistas" ni "aboca a más meses de incertidumbre a los españoles".