El Gobierno ‘blinda’ la Semana Santa como Patrimonio Cultural Inmaterial

    • El Gobierno equipara las manifestaciones culturales de la Semana Santa a las del Carnaval, "a pesar de sus significados contrapuestos".
    • La celebración se une a una lista en la que se encuentran otras manifestaciones como la Fiesta de los Patios de Córdoba o el flamenco.
Procesión de Semana Santa (archivo)
Procesión de Semana Santa (archivo)

En plena recta final del mandato del Gobierno, la Semana Santa se ha beneficiado de una de sus últimas actuaciones. El Ejecutivo de Mariano Rajoy ha tomado medidas para la salvaguardia de esta celebración religiosa a través de su declaración como “manifestación representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial”, tal y como refleja el BOE este lunes.

En concreto, el Gobierno tomará medidas como la realización de labores de identificación u descripción de la Semana Santa, además, incorporará testimonios en todos los formatos para garantizar su protección, y velará por “el normal desarrollo y la pervivencia de esta manifestación cultural”, según explica el artículo publicado por el BOE. El Gobierno evita de esta manera que se trate de modificar las celebraciones de la Semana Santa por parte de cualquier ejecutivo regional o municipal.

En la disposición del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte se indica que la Semana Santa se trata de “un fenómeno plural “, en el que “participan todos los géneros y capas sociales, en muchos casos al margen de la práctica religiosa”. En el texto se compara a la Semana Santa con otras manifestaciones culturales como el “Carnaval”, “a pesar de sus significados contrapuestos”.

El Gobierno se ha apoyado de mcuestiones como la inscripción de la Semana Santa de Popayán (Colombia) en el Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO. En el texto se ha hecho especial mención a la celebración en algunos pueblos de España. Además, también se ha señalado el carácter de algunas expresiones de la misma, como el llamado “paisaje sonoro”, en el que se incluyen cuestiones como las tamboradas, las carracas o las actuaciones con la voz humana a capella, en referencia a las tradicionales saetas.

Además, también se incluye dentro de este patrimonio cultural cuestiones más polémicas como la concesión de libertad a un preso en Málaga o en Elche. Además, también se hace un elogio de las cofadrías o de “los bienes muebles vinculados a las distintas Semanas Santas de España”.

La Semana Santa compartirá la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial con cuestiones como la Fiesta de los Patios de Córdoba o con el propio flamenco. Una disposición que ha pasado casi desapercibida en este último tramo de acción del Gobierno.

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