El Gobierno francés refuerza su lucha contra el fraude fiscal

  • El Gobierno francés anunció hoy que en los presupuestos rectificados para este año ha reforzado la lucha contra el fraude fiscal con medidas que aspiran a cumplir el objetivo anunciado de recaudar 1.000 millones de euros suplementarios en el combate contra ese tipo de prácticas.

París, 14 nov.- El Gobierno francés anunció hoy que en los presupuestos rectificados para este año ha reforzado la lucha contra el fraude fiscal con medidas que aspiran a cumplir el objetivo anunciado de recaudar 1.000 millones de euros suplementarios en el combate contra ese tipo de prácticas.

El texto fue presentado hoy en Consejo de Ministros por los titulares de Economía, Pierre Moscovici, y de Presupuesto, Jérôme Cahuzac, y en el mismo se busca someter a los contribuyentes sospechosos de fraude a una mayor transparencia ante las administraciones públicas.

Así, una persona que rechace desvelar el origen de una suma no declarada y colocada en el extranjero verá cómo a esa cantidad se le aplica un impuesto del 60 %, como si procediera de una donación.

El Gobierno, según el comunicado difundido por Economía, ampliará además el proceso judicial de investigación fiscal con prerrogativas "adaptadas a las evoluciones informáticas", para permitirle acceder a datos guardados a distancia o protegidos.

El fraude en el comercio del tabaco y en el mercado de coches de segunda mano se reprimirá también "con más eficacia", con concesiones como el refuerzo de los medios de los servicios de Aduanas en Internet.

"Las medidas de lucha contra los abusos en materia fiscal buscan limitar la capacidad de los contribuyentes de aplicar estrategias de optimización fiscal que se alejen del espíritu de la ley", señala la nota.

Los presupuestos rectificados sirven además para confirmar el objetivo de reducir el déficit al 4,5 % en 2012, pero reconocen que el impacto de la recapitalización del banco franco-belga Dexia podría impedir su cumplimiento.

El texto añade que estos presupuestos abarcan "una bajada histórica de los gastos del Estado" respecto a la ley inicial de finanzas de 2012, que se cifra en 3.600 millones de euros y según Economía "confirma la política de seriedad presupuestaria aplicada por el Gobierno".

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